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Bandada de estorninos en Israel, al atardecer. MENAHEM KAHANA / AFP
Europa pierde 600 millones de aves en cuarenta años

Europa pierde 600 millones de aves en cuarenta años

Un informe de tres sociedades científicas constata un enorme declive de la avifauna desde 1980, con pérdidas masivas de gorriones, lavanderas, estorninos y alondras

Martes, 16 de noviembre 2021, 02:08

El paisaje visual y sonoro de los campos, los bosques y las ciudades de Europa se empobrece a marchas forzadas. Porque la vida no es igual si faltan el canto o el revoloteo de los pájaros. Y esto es lo que está ocurriendo en el Viejo Continente, que ha perdido 600 millones de aves reproductoras en los últimos cuarenta años. Tres sociedades científicas (Royal Society for the Protection of Birds, BirdLife International y la Sociedad Checa de Ornitología) han documentado esta sangría de biodiversidad en un estudio donde se constata que las principales disminuciones afectan a aves comunes, como el gorrión (cuyas poblaciones han descendido en 247 millones de ejemplares), lavanderas boyeras (97 millones menos), estorninos (-75 millones) y alondras (-68 millones). El análisis de 378 de las 445 especies de aves nativas de la Unión Europea revela que se ha perdido una de cada seis.

Los datos son abrumadores, y además oficiales, porque el estudio se ha elaborado con la información del sistema paneuropeo de seguimiento del Consejo Europeo del Censo de Aves y de los informes obligatorios de los Estados miembros de la UE.

Los autores del documento calculan que entre 1980 y 2017 se ha producido un descenso global de la población de entre el 17% y el 19% del total, lo que equivale a una pérdida de entre 560 y 620 millones de aves individuales. De hecho, se han perdido unos 900 millones de aves durante ese periodo, aunque esta crisis se compensa en parte con un aumento de unos 340 millones en determinadas especies. Una gran proporción de estas pérdidas se debe a una disminución «muy importante» de un pequeño número de especies comunes, y lo mismo ocurre con los aumentos, señala en un comunicado SEO/BirdLife.

Política agraria y contaminación

Virginia Escandell, técnica de Ciencia Ciudadana de SEO/BirdLife, informa de que el 37% de las especies de aves comunes en España tienen declives en sus poblaciones que en algunos casos superan el 50% en los últimos 25 años. «No hemos cuantificado en millones de ejemplares las pérdidas, pero sin duda ahora tenemos considerablemente muchos menos ejemplares de golondrinas, perdices, codornices y vencejos, entre otras especies, que hace tan solo dos décadas».

El gran derrotado es el gorrión común, que ha perdido el 50% de su población desde 1980, un total de 247 millones de ejemplares. También han causado baja 30 millones de gorriones molineros. «Ambos se han visto afectados por los cambios en la política y la gestión agraria, pero los gorriones de las ciudades también han disminuido. Las razones de estos descensos urbanos no están claras, pero pueden estar relacionadas con la escasez de alimentos, la propagación de la malaria aviar o los efectos de la contaminación atmosférica», señala SEO/BirdLife.

Un gorrión bebe en una fuente. ROLF HAID / EFE

Las pérdidas totales más elevadas se observan entre las aves de las tierras de cultivo y los pastizales. Se reconoce ampliamente que los cambios en las prácticas agrícolas son responsables de la precipitada disminución de la fauna silvestre. Como grupo, las aves migratorias de larga distancia, como la curruca sauceda y la lavandera boyera, han disminuido proporcionalmente más que otros grupos, al igual que las aves costeras, como la avefría.

Una pista para el optimismo: gran parte del descenso del número de aves se produjo durante los años 80 y 90, y en la última década el ritmo se ha reducido. «En la UE, la Directiva de Aves y la Directiva de Hábitats proporcionan protección legal a las especies y enclaves prioritarios y han demostrado que benefician a la avifauna, además de mejorar la protección del territorio», añade la sociedad científica y conservacionista.

Por ejemplo, siete especies de aves rapaces han aumentado en las últimas décadas «gracias a una mayor protección y a la reducción de los pesticidas, así como a la introducción de proyectos de recuperación específicos. Sin la presencia de estas directivas europeas, no cabe duda de que el declive de muchas especies habría sido mucho peor», asegura SEO/BirdLife.

LAS ESPECIES MÁS AFECTADAS

  • Gorrión común -247 millones

  • Lavandera boyera -97 millones

  • Estornino -75 millones

  • Alondra -68 millones

«En España el conjunto de las poblaciones de aves comunes ligadas a los medios agrícolas (alondras, calandrias, collalbas, perdices, etc) ha disminuido un 27% en algo menos de tres décadas, lo que sitúa a los medios agrícolas como el tipo de hábitat más desfavorable para el mantenimiento de la biodiversidad en nuestro país actualmente», advierte Virginia Escandell.

«Es importante destacar que la pérdida de especies comunes es preocupante porque implica un daño a los ecosistemas y a su función, y potencialmente a la prestación de servicios ecosistémicos de los que depende la humanidad. El predominio de las especies comunes significa que los cambios en sus poblaciones pueden tener grandes implicaciones para la salud de nuestros ecosistemas», destaca la experta.

'Primavera silenciosa'

La científica de conservación de la RSPB (organización radicada en Reino Unido) y autora principal del estudio, Fiona Burns, alerta de que este estudio «es una llamada de atención sobre la amenaza real de las extinciones y de una 'primavera silenciosa', por lo que apoyamos plenamente que se garantice un marco sólido que sitúe la conservación en el centro de cualquier plan global. Necesitamos una acción transformadora en toda la sociedad para afrontar juntos las crisis de la naturaleza y del clima. Eso significa aumentar la escala y la ambición de la agricultura respetuosa con la naturaleza, la protección de las especies, la silvicultura y la pesca sostenibles, y ampliar rápidamente la red de áreas protegidas.»

Anna Staneva, directora interina de Conservación de BirdLife Europe, añade que «este informe muestra de forma clara y contundente que la naturaleza está dando la voz de alarma. Si bien la protección de las aves que ya son raras o están en peligro de extinción ha dado lugar a algunas recuperaciones exitosas, esto no parece ser suficiente para mantener las poblaciones de las especies abundantes. Las aves comunes son cada vez menos frecuentes, en gran medida porque los espacios de los que dependen están siendo arrasados por el ser humano. La naturaleza ha sido erradicada de nuestras tierras de cultivo, del mar y de las ciudades. Los gobiernos de toda Europa deben establecer objetivos legalmente vinculantes para la restauración de la naturaleza. De lo contrario, las consecuencias serán graves, incluso para nuestra propia especie.»

Alena Klvanova, responsable del departamento de seguimiento e investigación de CSO International, defiende la importancia de los programas a largo plazo basados en la ciencia ciudadana que se llevan a cabo durante décadas en todo el continente: «La obtención de un conjunto de datos tan amplio e inestimable sólo ha sido posible gracias a los incansables esfuerzos de los coordinadores de los programas nacionales de seguimiento y de miles de trabajadores de campo voluntarios, que cuentan las aves cada temporada de cría de forma estandarizada en casi treinta países europeos. Los resultados podrían ayudar al público, así como a los políticos responsables, a darse cuenta de que las aves comunes podrían no ser comunes para siempre si no tomamos medidas de conservación».

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