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C. García
Miércoles, 18 de enero 2017, 12:30
De un 'reality show' de famosos en el que muchos de ellos son trabajadores de la propia cadena o están muy ligados a ella no cabe esperar mucha transparecia. Gran Hermano Vip reúne los requisitos para desconfiar de él, así lo ha dejado entrever la propia Ivonne Reyes.
Comentando con sus compañeros cómo sería la expulsión del próximo jueves, Ivonne Reyes e Irma Soriano se mostraron dudosas por las formas. Lo cierto es que las concursantes no tienen del todo claro el procedimiento del concurso y teorizan sobre cómo se llevará a cabo.
«Entonces, primero el programa salva a uno y luego el público vota», se preguntaba la periodista. «Cuando les da la gana salva la audiencia y cuando no el programa», explicaba la venezolana. Y es que parece que la presentadora tiene dudas sobre la objetividad en GH Vip.
Mientras dentro de la casa discuten sobre quién salva el jueves a quién, fuera se sigue debatiendo sobre la «mano negra» de Belén Esteban en los nominados. Algunos culpan a la colaboradora de 'Sálvame' de que Toño Sanchís sea el más odiado de la casa. Otros creen que el representante continuará allí para que en el programa de las tardes de Telecinco se siga hablando sobre él.
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