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C. García
Lunes, 11 de julio 2016, 11:16
El quinto encierro de San Fermín ha destacado por la rapidez con la que los toros corrieron por las calles de Pamplona. Fue un recorrido limpio, con algunas caídas de algunos mozos, pero sin mayor importancia. Los toros salieron con gran bravura que sólo se dejó ver por la rapidez de la carrera.
Al ser lunes y haber menor afluencia de público, los mozos se han podido lucir más en su hazaña. En dos minutos, se había recorrido las tres cuartas partes del camino del quinto encierro de San Fermín, sin embargo, la caída de dos astados ha retrasado en encierro.
Mientras que la manada casi al completo llegaba a la plaza a los dos minutos y medio, dos toros caídos y demorados completaban el quinto encierro de San Fermín a los tres minutos y diez segundos. Dos de los toros se caían en la curva de un callejón, uno se levantaba más rápido y volvía a caerse en el tunel de la plaza; otro tardaba un poco más en levantarse y era conducido por los mozos hasta el final del quinto encierro de San Fermín 2016.
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