El truco de un nutricionista para conservar las legumbres en bote: no tienes que ponerles agua

Los métodos de conservación de alimentos son muy efectivos para no tener que desperdiciar aquellos que no se han podido consumir. Hay un sinfín de trucos que se utilizan para sacarle el máximo partido a diferentes productos: aguacates, plátanos, huevos, tartas, salsas, legumbres, etc. Sin embargo, hay que tener en cuenta que en estos casos es muy importante mirar con lupa si estos 'tips' pueden provocar el efecto contrario y originar algún problema de salud o intoxicación.

Recientemente, el doctor en Ciencia y Tecnología , Miguel A. Lurueña, advirtió del peligroso método de conservación viral que recomendaba guardar las zanahorias peladas y cortadas en tiras en el interior de un frasco con agua fría y colocarlo en la zona más fresca del frigorífico. Una práctica que este profesional alertó de que podía ser mortal, ya que puede favorecer el desarrollo de bacterias patógenas, como la llamada Clostridium botulinum, causante de botulismo. Por ello, es fundamental cerciorarse bien de que son seguros.

En este caso, ha sido el nutricionista Aitor Sánchez el que ha desmentido uno de los métodos de conservación más comunes de las legumbres de bote y ha explicado el truco para conseguir que aguanten más tiempo. Estos productos son imprescindible en cualquier cocina, ya que pueden sacar de más de una apuro, pero si su envase es demasiado grande es posible que no las utilicemos todas en el mismo momento.

Parece lógico pensar que es buena idea echarles un poco de agua y guardarlas en el frigorífico, puesto que suelen venderse con un líquido conocido como aquafaba que las conserva. Sin embargo, en estos casos echarles un chorro de agua puede ser contraproducente. Según explica este experto, esto hará que las legumbres sean «más atacables» por los microorganismos y facilitar su proliferación, además de que «se diluyen todos sus nutrientes».

También destaca que la costumbre de lavarlas nada más sacarlas del bote tampoco se debe hacer porque «le estaríamos retirando la sal y los antioxidantes» que traen. Por otro lado, en el caso de otros tipos de productos, como las aceitunas, los altramuces o el maíz, se desaconseja, ya que «se mantienen más tiempo abiertos y es importante mantener las concentraciones de sal y vinagre», asevera.

Para empezar, señala que, en principio, no sería necesario añadir nada. «Simplemente, tápalo bien y ciérralo. Te puede durar hasta tres días en el frigorífico». Aun así, otra de las opciones es ponerle un «buen chorro de limón» sobre las legumbres. De esa manera, afirma que se conseguirá que «no se pardeen», ya que la vitamina C del limón es antioxidante y va a «proteger» a las lentejas, alubias, o garbanzos.

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