Secciones
Servicios
Destacamos
El uso de inteligencia artificial puede servir para crear nuevas recetas, combinar ingredientes inesperados y mejorar la creatividad culinaria. Objetivo: diseñar platos nuevos, adaptar recetas y aprender nuevas técnicas culinarias. La IA puede ayudar a crear recetas originales combinando ingredientes de manera inesperada pero armoniosa. ... Por ejemplo, le pedimos a una IA: «Crea una receta de postre usando chocolate, lavanda y pimienta rosa». Una respuesta sería mousse de chocolate con lavanda y pimienta rosa, descrita como: a) base de mousse de chocolate amargo infusionado con lavanda; b) toque de pimienta rosa molida para un sutil picante; y c) servido con una reducción de frutos rojos y almendras tostadas.
Otra opción sería una adaptación de recetas según restricciones dietéticas. Por ejemplo, adaptar una receta para alergias, dieta vegana o necesidades nutricionales. En este caso, solicitaríamos, por ejemplo: «Convierte esta receta de lasaña en una versión vegana con alto contenido proteico». Una respuesta podría ser: a) lentejas o tofu en lugar de carne; b) bechamel de anacardos en vez de lácteos; o c) lonchas de calabacín o pasta sin gluten.
Podríamos pretender una fusión gastronómica con IA, como mezclar estilos culinarios para crear recetas de fusión novedosas. Pediríamos: «Crea un plato que mezcle cocina española y japonesa». A lo que nos podría responder tataki de atún con salsa de pimientos de Padrón y alioli de yuzú que fusiona la técnica japonesa del tataki de atún con los sabores intensos de la gastronomía española, pimientos de Padrón y un alioli con yuzú para darle un toque cítrico y umami.
Podríamos pensar en un maridaje inteligente de ingredientes cuando tenemos algunos ingredientes y no sabemos cómo combinarlos. Podríamos pedir, por ejemplo: «¿Qué ingredientes combinan bien con higos y queso azul?». Las sugerencias podrían ser: a) nueces caramelizadas; b) reducción de vinagre balsámico; c) jamón serrano y d) miel trufada.
Podríamos pretender una planificación de menús personalizados, y pediríamos ayuda para diseñar un menú completo para una ocasión o un perfil nutricional. Podríamos pedir: «Diseña un menú de cena romántica con tres tiempos y maridaje de vinos». A lo que nos podría sugerir: de entrada Carpaccio de remolacha con queso de cabra y rúcula (maridado con Sauvignon Blanc); como principal, risotto de hongos y trufa negra (acompañado de Pinot Noir); y de postre pannacotta de coco con coulis de maracuyá (maridado con Moscatel).
Podríamos, incluso, solicitar una optimización de sobrantes y desperdicio cero, si tenemos ingredientes sobrantes y no sabemos qué hacer con ellos. Podríamos pedir: «Tengo pollo asado, espinacas y arroz cocido. ¿Qué puedo hacer?». Unas sugerencias podrían ser: 1) ensalada de pollo con espinacas y aderezo de yogur; 2) arroz frito al estilo asiático con pollo y espinacaso 3) sopa de pollo y espinacas con un toque de limón.
La cocina cognitiva con asistencia de una IA no solo fomenta la creatividad, sino que ayuda a aprender sobre gastronomía, adaptarnos a diferentes necesidades y optimizar ingredientes. Se trata de dejarnos guiar por la IA para descubrir nuevas experiencias culinarias. En más de un sitio lo harán, sin avisarnos.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.