

Secciones
Servicios
Destacamos
Misión imposible. La de sentarse a comer en el Mesón Guinea si no ha llamado con cierta antelación para hacer una reserva. Este pequeño establecimiento de siete mesas (y una minúscula barra) ha sabido consolidar una cocina, comandada por José Caravaca (uno de tantos discípulos que ha ido esparciendo por la Región el maestro Raimundo González), tradicional, ‘casera’, honesta y contundente basada en un gran producto y en el respeto a la memoria culinaria colectiva. Y generosa, a tenor de las dimensiones de las raciones. Ubicado en la calle Vidrieros, frente a la recoleta plaza de San Antolín hace años que pone el cartel de completo cada día. Conseguida la hazaña de encontrar sitio, podemos degustar una ensalada de tomate, queso, jamón y almendras exquisita en su simplicidad, con un gran tomate... pelado. Todo un detalle. Podemos seguir con su ya famoso ‘dueto’ de una brocheta de salmón y gamba y un champiñón al horno, o con unas almejas, unas alcachofas al ajillo, unas patatas con huevos rotos o unas patatas rellenas de bacalao y pisto. Y entrar a matar con un rabo de toro como para ponerle un piso al cocinero, unas gelatinosas manitas de cerdo, unas brochetas de pescado o un mero rebozado. No hay carta. La oferta va variando según el mercado. Lo que sí tenemos asegurado es un señor plato de cuchara hecho a la vieja usanza cada día de entresemana. Y postres caseros. No se pierdan el ‘pan olvidado’, una especie de torrija con helado de turrón que te hace cerrar los ojos. El servicio, rápido y diligente, atento a cualquier capricho del cliente.
Dirección: Dirección: C/Vidrieros 1 Teléfono: 638 795 398
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.