Cartagena

La venta del Efesé a un fondo americano, cerca

Las conversaciones se han acelerado mucho en los últimos días y durante el fin de semana incluso se llegó a un principio de acuerdo. El precio final de la venta estaría ya pactado y se alejaría bastante de los 18 millones de euros que exigía Belmonte para traspasar la entidad este mismo verano. Las cosas están tan avanzadas que los representantes de este fondo de inversión volverán a visitar hoy mismo el estadio Cartagonova, con el fin de conocer más detalles sobre la realidad deportiva, económica, social e institucional del Efesé y saber cómo se funciona en el día a día del equipo.

El 85% de Duino Inversiones, representado en la figura de Felipe Moreno a través de su colaborador Fernando Carreño, está completamente de acuerdo con los términos pactados por López Atenza para, esta vez sí, vender sus acciones en el FC Cartagena. Desde que entró en el Real Murcia en marzo del año pasado, el empresario cordobés se marcó como prioridad desvincularse por completo del club albinegro. Y todavía no lo ha conseguido.

Estuvo muy cerca de lograrlo tres meses más tarde de aterrizar en el club grana, en junio de 2023. Pero una venta que estaba hecha se desbarató porque el requisito principal de Paco Belmonte era seguir él como presidente y gestionando el club. Y los compradores no lo aceptaron. La pasada Navidad también hubo una posibilidad muy real de que se concretara una venta. Pero tampoco se dio finalmente. Ahora, a la tercera, parece que Felipe Moreno sí podrá borrar su huella del Cartagena, lo que le evitará, entre otras cosas, problemas en el futuro con el CSD en caso de un hipotético ascenso del Real Murcia a Segunda División.

La pelota está ahora en el tejado de Paco Belmonte, quien representa el 15% restante de Duino Inversiones. Curiosamente, Moreno tiene mayoría en la sociedad que posee el 100% de las acciones del Efesé y, si quisiera, podría imponer su decisión, pero hace ya mucho tiempo que se desentendió por completo de los asuntos del Cartagena y lo dejó todo en manos de Belmonte, a quien siempre ha tenido en alta estima. A pesar de que su relación se ha enfriado bastante en los últimos meses, Moreno dio libertad absoluta a Belmonte para hacer lo que él quisiera con el club: seguir adelante en solitario, vender e irse o vender a un grupo que permitiera que él siguiera como presidente o director general.

Y ahora nos encontramos en ese punto. Se hará finalmente lo que quiera Belmonte, quien recientemente ha recurrido a un asesor fiscal ajeno al entorno de Felipe Moreno para asegurarse de que una venta de sus acciones no supondrá un quebranto para sus intereses a nivel económico y tributario. Su figura está muy desgastada entre la afición tras esta última temporada y prácticamente están rotos todos los puentes con sus interlocutores en el entorno del club, pero todavía no ha tomado una decisión y los norteamericanos ya saben que la operación no se hará si Belmonte no da el visto bueno.

De hecho, lo que el presidente del Cartagena transmitió hace unos días a los empleados del club es que tiene previsto continuar al frente de la entidad, manteniendo intacto el modelo de estos nueve años y el equipo de trabajo actual. Y su idea es lanzar cuanto antes una campaña de abonados que permita dar un respiro a la tesorería del club. Hace falta dinero para afrontar muchos pagos importantes antes del 30 de junio y lo que se ingrese en concepto de venta de carnés antes de esa fecha será una bendición para las necesitadas arcas del club albinegro. Para ello, una idea en la que se trabaja es que la campaña sea muy agresiva y se haga a tramos, de tal manera que los carnés salgan más baratos a los que antes los renueven. Y que el precio vaya aumentando con el paso de las semanas.

Con todo, nadie se atreve a dar por segura a día de hoy la continuidad de Belmonte. Porque esos pequeños pasos que está dando el aún presidente del Efesé no acaban de cristalizar en nada concreto y las decisiones más relevantes en materia deportiva (elegir a un sustituto para Julián Calero y ofrecer la renovación a pesos pesados de la actual plantilla) no se están abordando con determinación.

Y es que, en principio, el fondo de inversión estadounidense que tiene tan avanzado el acuerdo con López Atenza entraría con su propio equipo y un modelo distinto, siendo altamente improbable que Belmonte y Breis sigan gestionando el día a día del Cartagena. Y el sentido común dice que si hay una venta en ciernes lo mejor es no tomar ahora ninguna decisión que sea irreversible después.