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A la crisis deportiva, económica, social e institucional del FC Cartagena, penúltimo de la tabla en Segunda con dos puntos de ventaja sobre un Tenerife que ha jugado dos partidos menos, se le une un vacío representativo que no se vivía en el club desde ... hace muchos años. Y es que el presidente albinegro, Paco Belmonte, hace meses que dejó de acompañar al equipo en sus desplazamientos y delegó esa función meramente representativa en su mano derecha, el director deportivo, Manuel Sánchez Breis. Así, Breis y Sivori, miembro de la comisión deportiva del Efesé, son los que ejercen ese rol en los estadios que visita el equipo.
Solo dos veces ha viajado esta temporada Belmonte, a Santander y a Córdoba. En el resto de partidos a domicilio, la comitiva del Cartagena se ha reducido a dos personas: Sánchez Breis y Sivori. En el club jamás ha existido la figura de un portavoz ni de un director de relaciones institucionales. Sivori es el único exfutbolista que reclutó para su proyecto un Belmonte que siempre aglutinó todo el poder, los cargos y el rol de representante de la entidad en todas sus parcelas.
Así, cuando el presidente decidió desaparecer de la escena pública, tras su polémica rueda de prensa del 5 de septiembre de 2023 en la que todo comenzó a torcerse, el Cartagena se quedó sin voz y sin imagen pública. En los palcos rivales, donde muchas veces ejercía de representante albinegra la ex directora general Rebeca García (salió del club a finales de enero de 2023), comenzó a quedar libre casi siempre la butaca reservada al máximo mandatario del conjunto albinegro. No es lo habitual en Segunda, donde los presidentes o consejeros delegados de los clubes suelen representar a su equipo en todos los partidos, tanto en casa como fuera. En el caso de Belmonte, desde hace muchos meses, solo lo hace en los encuentros que se disputan en el estadio Cartagonova.
El pasado sábado en Castalia, Sánchez Breis recibió un regalo del club castellonense en el descanso del partido, algo que es bastante habitual. El director deportivo del Cartagena posó en la foto con un rostro muy serio, tremendamente incómodo y muy disgustado por el ridículo que había hecho su equipo en los primeros 45 minutos frente al Castellón. Pero no había otra opción, ya que él era la única persona que podía recoger ese obsequio.
Sánchez Breis siempre ha dicho que solo entra en materia deportiva y que el resto de parcelas son competencia de Belmonte. No está cómodo en este rol de figura representativa que tiene que compaginar ahora con la de director deportivo, pero ante la ausencia de Belmonte en casi todos los desplazamientos del equipo no hay otra alternativa. Tiene que hacerlo, le guste o no.
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Francisco J. Moya
Mientras tanto, el club prepara en silencio su Junta General de Accionistas de final de año, un mero trámite puesto que el consejo de administración del FC Cartagena está formado por Paco Belmonte, su hermano Mariano Belmonte y el propio Manuel Sánchez Breis. Todos los clubes celebran estos días su junta y la publicitan. La mayoría informan de cómo se cierra el año a nivel económico y ofrecen datos generales de cómo ha transcurrido el ejercicio. No es el caso del Efesé.
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