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El objetivo número uno del FC Cartagena desde que arrancó la pretemporada era librarse de Juan Carlos Real y Juanjo Narváez, los dos grandes fiascos de la temporada pasada y dos problemas heredados del controvertido mercado veraniego de 2023. Ambos tenían contrato en vigor y una elevada ficha, que ni concordaba con su rendimiento en el terreno de juego ni se ajustaba a estos nuevos tiempos en el club, que hoy frente al Burgos (El Plantío, 19.30 horas) arranca su quinta campaña consecutiva en Segunda.
Los años de vino y rosas con Rubén Castro, Pablo de Blasis, Álex Gallar, Raúl Navas, Tejera, Bodiger y compañía son cosa del pasado y ahora se impone una economía de guerra, en un escenario en el que cada céntimo cuenta. Todo aquel que no sea rentable no tiene sitio en este Cartagena 'low cost'. Por tanto, sabían Narváez y Juan Carlos Real que estaban en la diana.
Y para que no hubiera duda de ello ni siquiera se tapó un poco Manuel Sánchez Breis en su primera comparecencia del verano. Avisó públicamente de sus intenciones. O mejoran mucho o no seguirán en el Efesé, vino a decir el director deportivo albinegro. El atacante colombiano se rindió pronto y tras el partido contra el Intercity tendió la mano a Belmonte y Sánchez Breis para llegar a un acuerdo amistoso y marcharse cuanto antes. Todavía no tiene nuevo equipo, pero podría terminar en Chipre.
Lo de Juan Carlos Real, con contrato hasta 2026, ha sido distinto. El gallego se rebeló, fue titular en todos los encuentros importantes del verano, salvo el último ante el Albacete, y logró ser de los más destacados. A Abelardo no le sobraba. Al contrario, su posición tan específica de mediapunta, moviéndose a las espaldas de Ortuño, era muy valorada por el técnico asturiano.
Abelardo iba a contar con él e incluso partía con bastantes opciones de ser titular este domingo en Burgos. Pero se impuso el criterio del club, que necesitaba que Juan Carlos Real se fuera para liberar masa salarial y poder inscribir a los 20 jugadores que hay actualmente en la plantilla y a los dos (un extremo y un centrocampista) que quedan por llegar antes del 31 de agosto. Nada cambia con la salida de Juan Carlos Real, quien prioriza reencontrarse con Fran Fernández en el Real Murcia y a sus 33 años podría firmar un contrato de tres temporadas con la entidad grana. El mes pasado cambió su residencia, dejó San Pedro del Pinatar y se mudó a Murcia.
Nada varía en la planificación del Cartagena, que no fichará a un sustituto para el mediapunta coruñés. En la comisión deportiva albinegra entienden que tanto Luis Muñoz como Sergio Guerrero pueden actuar en la mediapunta y que con Ortuño, Escriche y Gastón Valles está cubierta la delantera. Hay solo tres extremos, Jairo, Cedric y Pocho Román, por lo que la llegada de un cuarto jugador de banda es imprescindible. Y falta un medio más para completar un centro del campo algo escaso, donde están Musto, Andy y los citados Sergio Guerrero y Luis Muñoz.
La salida de Juan Carlos Real es la confirmación de un fracaso. Fue el fichaje estrella hace un año, con una apuesta por tres temporadas que solo se había hecho anteriormente en ocasiones excepcionales, con Iván Calero, Julián Delmás e Isak Jansson. El gallego no funcionó con Víctor Sánchez del Amo (era imposible en ese contexto) y con Julián Calero no podía jugar por el estilo y por su evidente falta de intensidad, rigor defensivo y capacidad (falta de ella) para ganar duelos. Parecía que con Abelardo la cosa podía funcionar, pero no hemos tenido la oportunidad ni siquiera de comprobarlo.
Su salida, eso sí, posibilitó que los 20 jugadores de la plantilla quedaran inscritos ayer, antes de afrontar hoy el estreno liguero en El Plantío. Fuidias y Pocho Román no aparecen todavía en la web de LaLiga porque los dos competirán con ficha del filial y no serán dados de alta hasta que sean incluidos hoy en su primera convocatoria. Además, hay margen para inscribir a los dos refuerzos que faltan por venir. La plantilla será de 22 futbolistas.
Todo arranca esta tarde en Burgos, donde espera un rival que en las últimas temporadas le ha hecho bastante daño al Cartagena. Jon Pérez Bolo ha perdido a piezas importantes, como el portero Caro, Matos o Elgezabal, pero mantiene un buen bloque de la pasada temporada en el que destacan Curro (el más peligroso de todos), Fer Niño, Dani Ojeda y Álex Sancris. Tienen que llegar todavía entre tres y cinco jugadores a la plantilla blanquiazul, pero la pretemporada ha sido buena y Bolo ve a los suyos listos para competir a buen nivel.
«Sabemos la experiencia que tiene Abelardo y que sus equipos siempre son ordenados, con buena estrategia y que son difíciles de meterles mano. Ellos tienen jugadores veteranos, que saben lo que es esta profesión», destacó Bolo acerca del Cartagena.
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