La Región de Murcia presume de modernización hídrica

La Región de Murcia es uno los territorios que presenta mayor superficie de regadío total en España, junto con Andalucía y Comunidad Valenciana, según se desprende de la Encuesta sobre Superficies y Rendimientos de Cultivos en España (Esyrce), del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que recoge anualmente información sobre los sistemas de riego en parcela y los cultivos que las ocupan. El regadío representa en la Región el 40% del conjunto del terreno cultivado. La mayor parte son hectáreas de cultivos leñosos, entre ellos limonero, naranjo y mandarino, entre otros. Le siguen los frutales no cítricos, con el almendro, albaricoquero y melocotonero a la cabeza. El resto corresponde &ndashen este orden&ndash a olivar, cultivos leñosos (concretamente al algarrobo), viñedos y viveros.

El agua, un bien bastante escaso en el sureste, es vital para que el sector agrario continúe siendo punta de lanza de la economía regional. La reutilización de aguas residuales para su posterior uso en la agricultura se ha convertido en una alternativa de gran impacto, gracias a la eficiencia y garantías de este sistema hídrico. Esamur, dependiente del Gobierno regional, es el eslabón encargado de gestionar la depuración de las aguas residuales en toda la comunidad; y tal es su precisión, que depura el 99% de estas aguas que llegan de los hogares y las industrias. De hecho, más de 20.000 regantes y sus más de 80.000 hectáreas de cultivos se benefician de este recurso tratado, que no solo favorece la economía circular, sino también destaca por sus niveles de calidad y seguridad.

Esta optimización, sin duda, se ha convertido en todo un atractivo para un puñado de regiones de otros países y continentes que han visto en este caso de éxito un patrón a seguir. Lo mismo ocurre con el modelo de tecnología agrícola, la innovación y la eficiencia hídrica que se aplican en la Región de Murcia, cuyo interés suele constatarse con fuerza en las ferias especializadas como Fruit Attraction en Madrid y Fruit Logistica en Berlín, donde las administraciones y empresas del sector de la tecnología agrícola mantienen diferentes encuentros profesionales.

La construcción de invernaderos de última tecnología, procesos de fertilización o monitorización de cultivos mediante sondas, a los que se suman la tecnificación y eficiencia de los regadíos, como la detección temprana de fugas en las redes para evitar pérdidas innecesarias de agua y daños en los sistemas, son algunos de los proyectos innovadores con sello de la Región de Murcia que están revolucionando la industria agroalimentaria.

Las abundantes lluvias caídas desde la primera semana de marzo en la Región de Murcia han dejado un balance positivo, a excepción de las pérdidas materiales sobre el terreno que han sufrido algunas zonas. Uno de los titulares destacados de este episodio es que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé que esta primavera, estación que entró el pasado 20 de marzo, sea más húmeda de lo normal.

Otra noticia positiva es que se han llenado de agua las venas de la cuenca del Segura. Los embalses de la demarcación han ganado decenas de hectómetros durante este periodo de tiempo, teniendo en cuenta la cantidad que ha entrado y los desembalses que ha llevado a cabo la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) para evitar riesgos en estas infraestructuras. En total, las reservas en los pantanos han aumentado más de 250 hm3, rompiendo así la tendencia negativa en la que estaba sumida la cuenca debido a la sequía.

Las lluvias también han permitido poner un parche al periodo de ahogamiento por el que estaban atravesando los montes y parques regionales. Según la Consejería de Medio Ambiente, estas precipitaciones «podrían servir para frenar el decaimiento de las masas de coníferas (pinos, abetos, sabinas, cipreses, etc.) de confirmarse la tendencia hacia un año normal en la recuperación de las precipitaciones, aunque no resolverá la afección del arbolado de nuestros bosques de manera inmediata».

El jueves 6 de marzo, la CHS desembalsó agua en los pantanos del Azud en Ojós, de la Cierva en Mula, de Argos en Cehegín, de Pliego y de Moratalla para hacer frente a las avenidas de agua que llegaron durante el día por los ríos Segura y Mula, y al día siguiente hizo lo propio en el pantano de Santomera. En todo momento, las aperturas de las presas estuvieron controladas y se buscaba achicar la cantidad de agua que había llegado hasta los vasos de dichos embalses tras las fuertes precipitaciones de las últimas horas.

Cabe indicar que el agua desembalsada no implica una pérdida, puesto que los ecosistemas aprovechan la aprovechan como parte del ciclo natural del agua. Es más, las infraestructuras hidráulicas, aparte de almacenar estos recursos, también tienen la misión para gestionar las crecidas súbitas de los cauces de los ríos.

Utilizar la lavadora con la carga completa y el programa adecuado, no regar el jardín en las horas centrales del día, descongelar los alimentos en el frigorífico y no bajo el grifo abierto… son algunos de los hábitos que los ciudadanos pueden aplicar en casa para ahorrar agua, sino también dinero en la factura. Estos trucos tienen igualmente un impacto positivo para el planeta, puesto que se aprovecha más y mejor este bien tan escaso. A continuación, aparece una serie de consejos o recomendaciones para conseguir reducir el consumo de forma sencilla y cotidiana.

-Lavar las frutas y los vegetales en un cuenco, y no bajo el grifo. De esta manera, no se desperdicia tanto volumen de agua y el resultado de limpiar los alimentos se consigue igualmente.

-Cocinar al vapor en lugar de hervir los alimentos, lo que permite ahorra agua y, al mismo tiempo, que la comida conserve sus nutrientes.-Llenar el lavavajillas al completo para sacarle el máximo partido al programa de lavado; evitar poner el lavavajillas a media carga.

-Cerrar bien los grifos, porque un grifo mal cerrado se estima que puede perder hasta un litro cada 30 minutos.

-Vigilar las fugas y los escapes, porque los pequeños goteos de los grifos y cisternas suponen una gran pérdida de agua al día.

-Enjuagarse la boca en un vaso en vez de hacerlo, tras lavarse los dientes, con el grifo abierto.

-Llenar el lavabo de agua para limpiar la cuchilla de afeitar en vez de hacerlo con el grifo abierto.

-Optar por las duchas cortas y no por los baños. De este modo, el ahorro puede alcanzar hasta los 120 litros de agua durante una ducha de 15 minutos.

-Recoger el agua que sale en la ducha mientras se espera a que se ponga caliente para luego fregar o regar las plantas.

-Introducir una botella llena en el depósito del inodoro para reducir el volumen de agua que cabe dentro en cada carga.

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