La voz de la experiencia municipal

Patricia Fernández es la menor de tres hermanos y odontóloga de profesión. De ganar de nuevo igualaría a su antecesor, Manuel Marcos Sánchez Cervantes. Comenzó su andadura en el PP con tan solo 16 años ingresando en Nuevas Generaciones, aunque fue en enero de 2003, casi a punto de finalizar sus estudios, cuando Sánchez, que repetía como candidato a las elecciones municipales, le propuso ocupar un puesto preferente en sus listas. Desde entonces, no dejó de adquirir peso político en el partido y en sus bases, siendo elegida presidenta de NN GG de Archena ese mismo año.

Para las elecciones de 2007 ya ocupaba el número 2 de las listas, y fue entonces, debido a su trayectoria y proyección política, cuando la dirección regional del PP la incluyó en el Comité Ejecutivo Regional. En 2011 consiguió su primera mayoría absoluta que ha venido revalidando hasta ahora. Además, fue diputada en la Asamblea Regional entre 2015 y 2019 y vicesecretaria de Comunicación del Partido Popular de la Región de Murcia hasta 2018.

Joaquín Hernández es el mediano de tres hermanos. Estudió Magisterio de Educación Especial y Pedagogía Social en la UMU y, posteriormente, realizó un máster en Audición y Lenguaje, ejerciendo como maestro hasta 2011, año que fue elegido alcalde. Se declara un convencido «municipalista», un sentimiento que asegura llevar consigo desde que tiene uso de razón.

«Siempre me ha preocupado mi pueblo, y he querido ayudar y aportar, y lo he hecho desde las siglas del PSOE porque coincide con mi preocupación por la justicia social y la defensa de los intereses de todos, especialmente de las minorías y los menos favorecidos», señala. En 2011 consiguió 7 ediles frente a los seis del Partido Popular. Actualmente, cuenta con nueve concejales y el PP cuatro.

Los dos años de pandemia y la DANA fueron lo peor para los dos municipios. Tanto Patricia Fernández como Joaquín Hernández no dudan en apuntar a este fenómeno meteorológico y a la irrupción de la covid-19 como los dos acontecimientos que, si pudieran, borrarían del mapa.

«Dos circunstancias seguidas que han marcado a la ciudad y a los vecinos; es algo que no nos merecíamos pero que, afortunadamente, afrontamos con decisión y firmeza. Por eso, siempre tendremos un gran recuerdo para los que se fueron», afirma Fernández, aunque subraya que, sin embargo, «también ahí dimos un gran ejemplo de trabajo y coordinación, siendo incluso promotores a nivel regional y nacional de algunas iniciativas y propuestas de ayudas a la sociedad».

«Cuando vimos cómo familias de Lorquí perdían sus casas y mucho de lo que tenían, fue uno de los momentos más duros que he vivido como alcalde», apunta Hernández. Igual de apesadumbrado se muestra al recordar los difíciles dos años de la pandemia. «Aquellas comparecencias que hacíamos semanalmente en los momentos más duros nos recordaban a otros tiempos ya pasados, o la difícil situación de nuestros centros de salud, con un personal que se entregó al máximo a pesar de no dar abasto», añade el primer edil ilorcitano.

Los dos alcaldes y alcaldables afrontan los cuatro próximos años con mucha experiencia acumulada. La archenera lo hace con el aval de una población «que no ha dejado de crecer, un paro que ha descendido constantemente y una industrialización del municipio que no ha parado desde hace décadas». Fernández asegura que todos estos logros los ha conseguido «dialogando con los vecinos 365 días al año, escuchado sus problemas e inquietudes y luego trabajando sobre ellos para ponerles solución, yo creo que esa es la clave del éxito».

Por otra parte, destaca «la continuada bajada de impuestos y la mejora de infraestructuras». En cuanto a futuros proyectos, la regidora archenera subraya la rehabilitación del antiguo colegio Vicente Medina, la construcción del complejo deportivo de La Algaida, la puesta en marcha de la nueva piscina de verano y, como proyecta estrella, la inversión de casi 3,5 millones de euros en un proyecto de transformación turística de la ciudad.

Joaquín Hernández no duda en afirmar que la política «tiene muchas satisfacciones al poder ayudar a tus vecinos y a tu pueblo» y, así, destaca los grandes proyectos de su gestión: «desde aquellos en los que hemos trabajado la recuperación de nuestro patrimonio e identidad, como son los Cabezos de Lorquí, las casas cueva, la Casa de la Arboleda o la reciente adquisición de la Casa de la Plaza; como los que mejoran nuestras infraestructuras como el nuevo campo de fútbol, la rehabilitación del Ayuntamiento Viejo o la nueva biblioteca y escuela infantil, entre otros». Para el futuro, la creación de más infraestructuras, la rehabilitación del antiguo consistorio, la construcción de la piscina climatizada y la ampliación del cementerio son algunos de los proyectos en mente, sin olvidar nuevas inversiones en sanidad, agricultura y medioambiente, además de la creación de un plan de movilidad urbana sostenible.

Patricia Fernández y Joaquín Hernández tienen posibilidades de salir reelegidos el próximo 28 de mayo y cumplir los dieciséis años al frente de sus respectivos consistorios, Archena y Lorquí. Pero ni siquiera logrando esa antigüedad en sus despachos de alcalde alcanzarían a los regidores de la Región que más tiempo han cumplido en el cargo desde el restablecimiento de la democracia.

El socialista Manuel Hurtado salió elegido alcalde de Ceutí en las primeras elecciones libres tras la dictadura de Francisco Franco, celebradas en 1979 y se mantuvo en el puesto hasta 2007, cumpliendo un total de 28 años.

Durante el mismo periodo de tiempo, es decir, nada menos que siete legislaturas consecutivas, ejerció de alcalde en Ojós el independiente Bartolomé Bermejo. Otros 28 años estuvo el popular Fernando Molina en la alcaldía de Abanilla, aunque en distintos años (1987-2015). Veintidós (1993-2015) fueron los que duró Rafael Laorden en el Ayuntamiento de Blanca, y veinte (1995-2015) Miguel Ángel Cámara y Pilar Barreiro en Murcia y Cartagena, respectivamente.