Este es el plazo para pedir el paro: puedes perder la prestación por desempleo

La prestación contributiva por desempleo, más conocida como 'paro', es una ayuda destinada a las personas que han perdido su trabajo. La cuantía se calcula haciendo una media de las bases de cotización de los últimos 180 días (seis meses) anteriores a la situación legal de desempleo y su duración depende del tiempo que se haya cotizado en los últimos seis años.

El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) indica que por cada año trabajado se otorgan cuatro meses de prestación. El tiempo máximo que se puede cobrar este subsidio es de dos años, para lo que habría que acumular seis años de empleo. Otro de los supuestos que también permite solicitar el 'paro' es cuando un contribuyente quiere compatibilizar la prestación con un contrato a tiempo parcial. En este caso, cobra una parte proporcional, es decir, recibirá el porcentaje del subsidio correspondiente a la diferencia entre la jornada completa y las horas que trabaja.

Las personas que se encuentren en desempleo tienen un periodo de tiempo determinado para solicitar la ayuda. En concreto, dispone de 15 días hábiles, que empiezan a contar a partir del último día trabajado o de la finalización de las vacaciones. Pero, ¿qué ocurre si se pide más tarde? Si se pasa el plazo, el beneficiario no pierde el derecho a recibirlo por completo, pero sí que tendrá una especie de penalización.

El artículo 268 de la Ley General de la Seguridad Social establece que «quienes acrediten cumplir los requisitos [...], pero presenten la solicitud transcurrido el plazo de quince días [...], tendrán derecho al reconocimiento de la prestación a partir de la fecha de la solicitud, perdiendo tantos días de prestación como medien entre la fecha en que hubiera tenido lugar el nacimiento del derecho de haberse solicitado en tiempo y forma y aquella en que efectivamente se hubiese formulado la solicitud».

Dicho de otro modo, el desempleado perderá todos los días desde que finalizó su contrato hasta que ha realizado la solicitud. Ante esta situación, tiene que valorar si le compensa pedir la ayuda a pesar de descontar un número determinado de días o si prefiere guardar la duración al completo para el futuro.

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