El cambio que experimentarán las nóminas en 2024

A partir del 1 de enero las nóminas de los trabajadores, tanto por cuenta ajena como autónomos, experimentarán un cambio, que repercutirá de manera negativa en el importe que recibirán los asalariados a fin de mes. Esto se debe al aumento previsto en el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), una cotización adicional que se aprobó en diciembre de 2021 tras, la negociación entre los sindicatos y el Gobierno, y que entró en vigor en a principios de 2023.

Esta medida tiene el objetivo de equilibrar y reforzar el sistema de pensiones ante el incremento del gasto derivado de la jubilación de los nacidos entre finales de los cincuenta y finales de los setenta. Por lo que se trata de una cotización con carácter finalista que busca dotar el Fondo de Reserva de la Seguridad Social.

De hecho, se espera, desde que entró en vigor en enero de 2023, que se llegue a recaudar en torno a los 50.000 millones de euros en los próximos 10 años, que irán a engrosar la hucha de las pensiones.

En 2023 se estableció el MEI en el 0,6%, de este porcentaje el 0,5% lo debía pagar la empresa y el 0,1% el trabajador. A partir del 1 de enero, esta cifra subirá hasta el 0,7% y en este caso la cantidad se dividirá en un 0,12% para el asalariado y el 0,58% al empresario. Por lo que ese 0,1% en la nómina de cada trabajador durante 2024, en función del salario, será de entre unos 48 o 428 euros al año.

Este porcentaje irá subiendo hasta el 31 de diciembre de 2050 con arreglo a la siguiente escala:

- En 2024, se pagará un 0,7% (0,58% la empresa y 0,12 el trabajador).

- En 2025, será del 0,8% (0,67% a cargo de la empresa y 0,13% por cuenta del trabajador).

- En 2026, será del 0,9% (0,75% lo paga la empresa y el 0,15% el trabajador).

- En 2027, será del 1% (0,83% la empresa y 0,17% el trabajador).

- En 2028, será del 1,1% (el 0,92% a cargo de la empresa y el 0,18% por cuenta del trabajador).

- En 2029, será del 1,2% (1% a cargo de la empresa y 0,2% a cuenta del trabajador).

- Desde 2030 y 2050 se mantendrá el mismo porcentaje del 1,2%, con igual distribución entre empresario y trabajador.

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