Agresión en un partido de infantiles en Murcia: aficionados atacan a un delegado y a varios menores

Alguazas fue este domingo escenario de un episodio lamentable en el mundo del fútbol base regional. Un grupo de aficionados violentos fueron los protagonistas de una terrible agresión a un delegado de equipo. Ocurrió en el encuentro entre el Atlético Villa de Aguazas y el San José Los Ángeles de Molina de Segura de categoría infantil. Y la víctima fue un miembro del conjunto visitante.

Los hechos ocurrieron poco antes de las seis de la tarde en el campo de fútbol de Alguazas, cuando concluyó el partido, que enfrentó a jugadores de entre 12 y 14 años. En el duelo se escucharon los primeros piques entre los chicos, fruto quizás de la emoción del duelo, que enfrentaba a los líderes de la clasificación (San José Los Ángeles), con otro de los clubes punteros que quería acercarse a la primera posición, el Alguazas.

Parecía que todo se quedaba ahí, en simples palabras, puesto que varios jugadores, y los técnicos y delegados de ambos equipos dieron por cerrado el partido con un apretón de manos y un saludo. Pero justo en ese momento comenzó la pesadilla, sobre todo para Juan José Conesa, delegado del conjunto molinense.

Según indican a LA VERDAD fuentes del San José Los Ángeles de Molina, dos jugadores se enzarzaron al terminar, lo que provocó que varios aficionados locales se encararan con algún futbolista. «Intentaron meterse en los vestuarios a amedrentarnos incluso», añade un directivo del equipo molinense. Ese fue el momento que aprovechó Juan José Conesa para intermediar entre los chicos y seguidores para que la trifulca no fuera a más y se quedara ahí. Pues nada más lejos de la realidad.

«Los jugadores del Alguazas le dijeron a sus aficionados que el delegado les había insultado. Eso es algo imposible; el que lo conozca sabe que no es capaz de decirle nada malo a nadie», comenta un directivo del conjunto visitante. «Soy la persona más pacífica del mundo; en mi vida le diría algo a un crío de esa edad», apostilla el propio Juan José Conesa.

Viendo lo que podría ocurrir tras recibir «graves amenazas» de los seguidores locales, el delegado del equipo de Molina puso en conocimiento de la Policía Local de Alguazas los insultos que estaba recibiendo. «Me estaban amedrentando diciendo que esperaban a la salida en la puerta», señala Juan José.

La pareja de agentes que se encontraba en el campo protegió a Juan José en un lado del campo y aprovechó para sacar al resto de jugadores para que pudieran marcharse a casa. En ese momento, el delegado se quedó solo junto a un banquillo, instante que aprovecharon «decenas de seguidores del equipo local para agredirme. Me dieron puñetazos y patadas por todos los lados. Llegó un momento en el que apenas veía piernas dándome en el suelo», confiesa la víctima.

Todo esto se produjo en presencia de su hijo de once años, otro de cinco y su mujer. «Los golpes físicos se olvidan y dejan de doler, pero ver lo que sufrieron y cómo están tardará mucho más», reconoce Juan José. El hijo mayor del delegado también sufrió varias agresiones. «Entraron a por mí pero también le dieron a él por ser el portero del equipo. Mi mujer sufrió una crisis de ansiedad y el pequeño solo podía llorar y decir que nos fuéramos de allí», añade el delegado.

Juan José interpuso la denuncia en la Policía, que asegura que tiene identificados a varios de los agresores. También cuenta con un parte de lesiones tras acudir al hospital. Pero el dolor que siente la víctima no es tanto por los moratones y chichones con los que cuenta, sino por las palabras que salen de la boca de su pequeño. «Si me dan más fuerte y en la cabeza no sé lo que podría haber pasado. Pero lo peor de todo es escuchar a mi hijo decir: 'Papá, no quiero volver a jugar al fútbol'. Les dijeron que los iban a ir a buscar al siguiente partido y él no quiere ir», sentencia un delegado dolorido y asustado pero también un padre tremendamente afligido tras lo acontecido.

Este triste episodio ha hecho mella en la cabeza de unos jugadores de apenas 12 años que sueñan con llegar a algo en el deporte del balón el día de mañana. «Los chicos están muy afectados. No quieren volver a pisar un campo de fútbol muchos de ellos», señalan desde la directiva del San José Los Ángeles. Desde la entidad esperan que la denuncia sirva al menos para que niños de esta edad no tenga que ver jamás tanta agresividad en un campo de fútbol. «No se merecen algo así, son imágenes que se les pueden quedar para toda la vida», añaden.

LA VERDAD intentó ponerse en contacto en multitud de ocasiones con el Atlético Villa de Aguazas, pero no obtuvo respuesta. Según publicó la Cadena Ser este lunes, desde el club están dispuestos a colaborar para esclarecer lo sucedido y lamentan lo ocurrido. Añaden, además, que la situación se fue de control y apoyan la versión del delegado Juan José Conesa en todo momento. La entidad ha solicitado al Comité de Competición de la Federación de Fútbol de la Región de Murcia que prohíba la entrada de aficionados al estadio en los partidos de categoría Infantil.

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