La eterna espera de Sanmartín para debutar en la Deportiva Minera

Dos meses, ocho partidos y cero minutos. Esa es la situación que le toca vivir ahora mismo a Adrián Sanmartín, uno de los fichajes invernales de la Deportiva Minera que, sin embargo, todavía no ha debutado. El atacante cartagenero de 19 años no arrastra ningún problema físico, entrena a diario en el estadio Ángel Celdrán pero cuando llega el fin de semana o no juega o directamente se queda fuera de la lista de convocados.

La razón de esta larga espera para Sanmartín, de acuerdo a diferentes fuentes consultadas, atiende única y exclusivamente a una decisión técnica. El cartagenero acababa de llegar a un vestuario nuevo, el 23 de enero, cuando Popy ya encaraba la recta final de su periodo en el Llano del Beal. La llegada de un nuevo entrenador abría las puertas para empezar de cero y que, de alguna manera, a Sanmartín le sirviera para tener alguna oportunidad. Pero la Minera apostó por Pepe Aguilar, un técnico con el que tuvo alguna diferencia en el pasado, cuando compartían día a día en el Cartagena B.

Sanmartín abandonó la entidad albinegra hace un año sin que el club lo comunicara oficialmente. Lo hizo tiempo después de convertirse en uno de los grandes referentes de la cantera del Efesé, pues su progresión subió como la espuma y con 17 años recién cumplidos Luis Carrión lo hizo debutar en el primer equipo, en Segunda, en una cita frente al Alavés. El futbolista de La Puyola hizo migas con Mikel Rico y durante semanas estuvo en la dinámica de los mayores y entrando en las convocatorias. Lesiones, recaídas y molestias le apartaron del foco, si bien con el visto bueno de Pepe Aguilar quedó integrado en el filial de Segunda RFEF. Debutó y tuvo buenos momentos, pero descendió al juvenil y luego se marchó al Ilicitano.

Esta temporada la inició de nuevo en casa, en el nuevo proyecto del Deportivo Marítimo en Cartagena, con la firme idea de buscar los minutos que le faltaron durante toda la campaña anterior. En esa salida de puntillas del Efesé, Aguilar deslizó que había asuntos extradeportivos. «Son circunstancias que para nada se acogen a caprichos, sino a comportamientos. Yo a Adrián Sanmartín, el cual debutó conmigo en Tercera [y en Segunda RFEF] siendo un crío, le deseo lo mejor. Le deseo lo mejor de corazón. Pero el club está muy, muy, muy por encima de cuales sean las personas que lo conforman, jugadores, entrenador, etc. El club por encima», dijo. Hay quienes dicen que limaron asperezas, pero de momento el reencuentro entre ambos no se ha visto traducido en el verde.