Revolución en la movilidad

Demasiado tiempo; sin discusión. Más allá de la implantación de la línea 1 del tranvía, hace ya más de una década, el sistema de transporte ... público de Murcia y su área metropolitana ha permanecido en el olvido durante años y años, sometido a sucesivas prórrogas contractuales y a parches que no han hecho más que apuntalar el progresivo deterioro del servicio. Tras la última patada hacia adelante dada en 2021 –con la implantación de una concesión transitoria–, el servicio de autobús del municipio encara por primera vez el próximo curso con la perspectiva de una auténtica revolución pensada para adaptarlo a las exigencias del siglo XXI. Aunque el nuevo contrato no estará en funcionamiento hasta diciembre de 2023, fue a finales del pasado mes de octubre cuando arrancaron las obras del nuevo Plan de Movilidad municipal, que supondrán la creación de una red de plataformas segregadas que permitirán mejorar los tiempos de viaje, así como ampliación del mapa de carriles bici, con la que se busca impulsar el uso de este medio de transporte y de los vehículos de movilidad personal. Sin embargo, toda elección implica una renuncia, y dar más espacio a los medios de transporte colectivo y sostenibles supone restárselo al coche, tanto en cuanto a la circulación como al aparcamiento. Por lo general, el ser humano no es amigo de los cambios bruscos, más aún cuando no se le ha hecho partícipe de ellos, como en este caso, dada la premura en el diseño y ejecución de los proyectos que marca Europa. Tampoco se han articulado las medidas necesarias para facilitar la transición al nuevo modelo, ya que los trabajos arrancaron sin la finalización de los seis parkings disuasorios prometidos y sin mejoras en las líneas actuales de autobús. Así, las máquinas se pusieron manos a la obra entre unas protestas vecinales y del sector del comercio que han ido perdiendo intensidad. También es cierto que las tareas más invasivas se han dejado para después de las fiestas. Ahí se verá cómo responde Murcia al estrés que puede suponer una ciudad levantada por obras durante meses.