![La huella artística de una fortaleza](https://s2.ppllstatics.com/laverdad/www/multimedia/202104/24/media/cortadas/ar1-kjdG-U140154458833ImH-1248x770@La%20Verdad.jpg)
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Su silueta es icono para quienes habitan las tierras frente a las que se erige. Lo es hoy, convertido en Bien de Interés Cultural (BIC), y lo ha sido a lo largo de sus cinco siglos de historia. El castillo de Mula y su huella ... son el motivo de la exposición '1520. Obra en proceso' que el domingo pasado se aperturó al público en el antiguo Convento de San Francisco de Mula, sede del Museo de la Ciudad. Una muestra colectiva y multidisciplinar que pretende conmemorar el V aniversario de los primeros trabajos de construcción de la fortaleza, y que reúne a diecinueve destacados artistas de la Región.
Inspirados en los muros de la antigua fortificación –levantada por la casa de los Vélez como reflejo de su supremacía–, cada uno de ellos ha dado vida a una obra en la que imprimen su personal visión del castillo muleño, tras visitarlo en julio del pasado año.
Sus propuestas son «obras en proceso» que no solo revelan «una imagen», sino que, afirma el comisario de la exposición, José Antonio Zapata, proyectan aquello que los artistas sintieron cuando se situaron frente a sus muros. Organizada por el Museo Ciudad de Mula y la Concejalía de Cultura y Patrimonio Histórico, con la colaboración del Instituto de las Industrias Culturales y de las Artes (ICA), la exposición se podrá disfrutar hasta finales de ese año. Incluye 18 cuadros, uno de ellos firmado por dos artistas, los dibujantes Jorge Gómez y Juan Álvarez, y elaborados con distintas técnicas, desde acuarela a óleo, el dibujo o la fotografía.
«El castillo de Mula es la imagen por antonomasia de la ciudad, es la marca identitaria de un lugar cuya historia está inexorablemente unida a su monumento más insigne. No se puede entender hoy día la ciudad de Mula sin su castillo. Es alzar la mirada y encontrarlo en el horizonte, inmutable, fuerte, eterno. El tiempo no pasa por él. Las pérdidas y daños no son sino pequeños rasguños en los quinientos años de su existencia», avanza Zapata en el prólogo de la exposición. También director del museo muleño y responsable de la actividad arqueológica en el municipio, Zapata recuerda que «fue en el año 1520 cuando el primer marqués de los Vélez, don Pedro Fajardo Chacón, comenzó a edificar el castillo».
«Eran tiempos convulsos en el reino de Murcia, con la capital levantada en comunidad a causa del nombramiento de Carlos I como rey de España. La villa de Mula, que había sido entregada un siglo antes a la familia Fajardo como señorío, a diferencia de los que pasó en otras ciudades, no se alzó contra el rey, pues la villa siempre se había considerado de realengo. Su levantamiento fue contra el marqués, en una lucha de poder entre el concejo, dominado por las familias nobles de Mula y los Fajardo».
Esas luchas son parte de la historia de Mula, que tiene en el castillo un reflejo innegable de su pasado. «El impacto de la edificación –sostiene Zapata– cambió la imagen de la villa para siempre», una imagen que ahora retratan e integran en su obra creadores como Carmen Cantabella, Nicolás de Maya, Rosana Sitcha, Torregar, Antonio Tapia, Cristina Gutiérrez, Ramón González, Nono García, Daniel Belchí, Juanjo Martínez Cánovas, Carlos Cotes, Antonio Castillo, Pepe Montijo, Ilu Ros, Jean Carlos Puerto, Andrés García Mellado, Cristóbal Pérez y los ya citados Jorge Gómez y Juan Álvarez.
Todos ellos, dice Zapata, «mantienen una conversación» artística y simbólica con la fortaleza, «la única –subraya el arqueólogo– de época renacentista en la Región». '1520. Obra en proceso' se complementa con un vídeo de animación elaborado por el muleño Ramón González que «muestra, recordando las obras y tratados científicos de Leonardo Da Vinci, el proceso de construcción de la fortaleza», así como «el esfuerzo sobrehumano de los hombres que trabajaron en ella a un ritmo frenético acompasado de tambores, que culmina con la erección del castillo en la cumbre rocosa que protege a la ciudad de los vientos del norte», recoge Zapata.
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