El UCAM quiere agotar sus últimos cartuchos para salvarse. Lo tiene crudo, pero no tira la toalla. La entidad que preside la familia Mendoza realizó un importante desembolso económico a principio de temporada, así como en el mercado invernal, para conseguir mantenerse en la tercera categoría del fútbol nacional. Pero se ha complicado la vida de una manera increíble.
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José Manuel Aira y su cuerpo técnico han conseguido que la plantilla sea competitiva. Los jugadores del UCAM lidian con la tensión de estar durante más de cuatro meses en los puestos de descenso. La semana pasada abandonó el club el portero Biel Ribas, después de tener un roce en un entrenamiento con compañeros y de que tanto futbolista como dirección deportiva decidieron poner fin a la relación contractual.
Con Aira se ve otra cosa, pero los resultados no llegan. El principal problema que tiene el equipo azulón es que no consigue encadenar dos victorias consecutivas. Desde la llegada del entrenador leonés se ha conseguido una victoria, dos empates y dos derrotas. Los resultados distan mucho de los de un equipo que pelea por salir del pozo. Y el problema es que quedan seis jornadas solamente y la salvación está a seis puntos.
El periodista de 'Onda Regional' Antonio Gomariz cree que los universitarios no tienen opciones de permanecer en la categoría de bronce. Para él, que ha seguido toda la temporada del conjunto azulón, la suerte está echada. «Es una quimera que las matemáticas todavía sostienen, pero dada la situación lo considero improbable». Él está convencido de que «la incapacidad de reacción del UCAM esta temporada es indicativo de que un equipo va más allá de la suma de jugadores de calidad», indica la voz de los universitarios en las retransmisiones de la radio pública autonómica, insatisfecho con el nivel que han mostrado los azulones durante toda la campaña. Entiende que ya es imposible salvarse y que, por tanto, el descenso a 2ª RFEF está cantado.
Por su parte, el técnico Alejandro Sandroni, ex del Yeclano y del Linares, se muestra más optimista con la salvación de los azulones. «Siempre hay opciones mientras queden puntos, la salvación puede estar en 48, tienen plantilla y un buen entrenador», responde confiado el entrenador argentino afincado en la Región de Murcia, quien respeta y valora a José Manuel Aira.
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El argentino está convencido de que «las carencias y las virtudes de los equipos son muy difíciles de cambiar, solo se pueden esconder los puntos flacos y potenciar los más fuertes», declara Sandroni, que cree que es cosa principalmente de los jugadores: «Lo principal es que se unan, dejen los egos; no piensen en el año siguiente y crean que pueden conseguir salvar la temporada», indica Sandroni.
La escuadra universitaria está a seis puntos del descenso cuando aún quedan 18 puntos en juego. Eso sí, hay varios rivales con objetivo de entrar al 'playoff' y otros incluso que aspiran al ascenso directo. Algeciras, Linares, Costa Brava, Atlético Baleares, Andorra y Barcelona B son los seis enfrentamientos que tiene pendientes el UCAM. Solo un milagro salvará al equipo murciano, que hace un año casi asciende con Salmerón en el banquillo y ahora se encuentra en una situación muy delicada.
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