Jordi Sánchez, un 'killer' en los remates de cabeza sin puntería con los pies

El triunfo universitario en Lorca tuvo dos nombres propios. Por un lado, el de José María Salmerón, que empezaba a estar muy cuestionado con la fatídica racha del equipo. El técnico almeriense era consciente de que un nuevo tropiezo ponía su puesto en peligro porque se enfrentaban al colista. Sin embargo, con la victoria volvió a coger colchón con respecto a sus perseguidores a falta de solo tres jornadas.

El otro gran protagonista del UCAM fue Jordi Sánchez. El delantero llegó en el mercado de invierno cedido desde el Castellón, equipo de Segunda, y de momento está siendo un hombre fundamental para los azulones. El catalán lleva cuatro partidos y ha marcado tres goles que han sido fundamentales para que los universitarios consigan cuatro puntos. Jordi no pudo hacer prácticamente nada en su debut contra el Córdoba porque los andaluces sometieron totalmente a los murcianos en la última media hora de partido que disputó. Sin embargo, contra El Ejido se estrenó con un gol de cabeza que sirvió para conseguir el empate. No vio tampoco portería en su segundo partido como local frente al Betis Deportivo y de nuevo tuvo más fortuna a domicilio el pasado sábado en el Artes Carrasco con un doblete para conseguir los tres puntos.

Uno de los aspectos llamativos del catalán, que mide 1,90 metros, está siendo su gran remate de cabeza. De hecho, los tres tantos que ha marcado han sido con la testa. Contra El Ejido remató con la cabeza desde la frontal del área un balón en profundidad aprovechándose de la mala salida de Wilfred. La jugada le dejó prácticamente como única opción ese golpeo con la testa, pero fue llamativo ver ese remate. El sábado contra el Lorca fue todavía mejor porque hizo dos auténticos golazos contactando de la misma manera con el balón. El primero tras un centro perfecto de Johan desde la banda derecha y el segundo a la salida de un córner, botado por Santi Jara, y que no era nada fácil de mandar al fondo de la red.

Esa precisión y acierto con la cabeza llaman más la atención al comparar esas acciones con las que ha tenido con los pies. En Santo Domingo tuvo varios remates claros con la derecha, su pierna buena, y no consiguió abrir la lata. De hecho, el propio Jordi Sánchez reconoció que pudo irse con un 'hat-trick' al descanso. Y, frente al Lorca Deportiva, volvió a fallar con empate a cero un gol que debió meter. El ariete recibió un gran pase de Liberto dentro del área y, con todo el tiempo del mundo para pararla, decidió pegarle de primeras y fallar un tanto que parecía cantado. En cualquier caso, si sigue haciendo goles a este ritmo lo menos importante será la parte del cuerpo con la que contacta con el balón.