Todos los pasos para limpiar correctamente las puertas de madera y que no se estropeen

Para mantener en buen estado todos los elementos de tu hogar debes limpiar con los productos adecuados. Las puertas son una de las partes que más se utilizan en el día a día. Por ello, la limpieza de este elemento de tu casa debe ser constante y ayudará a mejorar el aspecto de tu hogar. Es frecuente que las puertas de las habitaciones de casa sean de madera. Estas son complicadas de limpiar si no tomas las medidas necesarias, ya que si no usas los productos de limpieza adecuados solo puedes empeorar su estado.

Puede parecer que las puertas no se ensucian, pero la madera es uno de los materiales que se acumula suciedad día a día. Para que esto no ocurra debes utilizar los productos de limpieza adecuados que conservarán el brillo natural de las puertas y no necesitarás gran cantidad de productos químicos. No se puede utilizar cualquier producto para limpiar las puertas de madera. Para que esto no ocurra debes seguir una serie de recomendaciones y utilizar los productos adecuados.

Para evitar que las puertas de madera se estropeen existen algunos consejos y hábitos de limpieza que te pueden ayudar:

- Empieza utilizando un plumero para eliminar el polvo más superficial.

- Después, emplea un paño seco o una bayeta de microfibra limpia con agua y jabón neutro. A continuación, retira de la misma forma el producto con un paño limpio.

- Para los marcos y manillas de las puertas lo mejor es utilizar productos que estén elaborados específicamente para cada material. Puede que estos necesiten una limpieza más detallada.

- Se recomienda limpiar las puertas de madera al menos dos veces a la semana.

- Si las puertas están muy sucias y quieres eliminar la suciedad incrustada y desinfectarlas, puedes utilizar productos más específicos que cuiden la madera de la misma forma que el agua y el jabón.

Dependiendo del material del que estén hechas las puertas, tienen un modo de limpieza diferente.

- Las puertas lacadas: no admiten productos abrasivos. Limpia con agua tibia y jabón neutro y seca con una gamuza de algodón.

- Puertas de chapa de madera: no uses disolventes. Utiliza una esponja mojada en agua templada y seca con una gamuza en el sentido de las vetas.

- Puertas de madera maciza: se limpian igual que las de chapa, pero puedes utilizar cera para muebles.

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