La advertencia de un restaurante de Ricote a los comensales que pidan vaca vieja: «No va a comer, pero sí va a pagar»

La máxima de «el cliente siempre tiene la razón» no se cumple en este restaurante de Ricote, donde, en una de las primeras páginas de su carta se advierte a aquellos comensales que se vean tentados a pedir uno de sus «platos estrella»: el chuletón de vaca vieja.

Se trata de El Sordo, un conocido local en la gastronomía de la Región de Murcia donde le precede la fama de su calidad. Lo acredita, entre otros reconocimientos, contar con un sol en la Guía Repsol de 2022 o haber estado incluido en el apartado Big Gourmand (mejor calidad precio) de la Guía Michelin 2021.

En la carta del restaurante se pueden encontrar, además de una extensa y sentida dedicatoria en recuerdo de su fundador, el restaurador Paco El Sordo, una advertencia que ocupa una página completa. ¿El motivo? Evitar malentendidos una vez que llegue la hora de pedir 'la dolorosa'.

La carne vieja «es, sin duda, una de las mejores carnes rojas maduradas que se pueden comer en el planeta Tierra. Su textura, su sabor y su olor son indescriptibles. Un auténtico placer gastronómico, pero... tiene bastante grasa y hueso que usted posiblemente no va a comer, pero sí va a pagar», explica el mensaje.

«Esto lo tiene que tener usted muy claro y asumido antes de pedirnos una chuleta de vaca vieja madurada, porque esto es así», continúa la advertencia y pone como ejemplo el «desperdicio» que se hace del jamón serrano. «Es como cuando usted compra un jamón, si separa la grasa, el hueso y la pezuña, es decir, el desperdicio que no se come pero que sí paga, verá que supone aproximadamente la mitad del jamón... pues con nuestra vaca, ocurre lo mismo», sentencia el restaurante.

El aviso no acaba ahí, sino que el mensaje adquiere un tono directo hacia el cliente e, incluso, con cierto cariz agresivo: «A mí me da igual vender una chuleta que cien, o ninguna, ¿de acuerdo? Bien. Pues ahora, si usted quiere disfrutar, puede pedirnos un chuletón».

Este comunicado lleva presente en la carta del restaurante desde hace años (en Trip Advisor se puede encontrar una fotografía de 2019 que lo ilustra). Sin embargo, algunos usuarios de redes sociales se han hecho eco ahora. Hay quienes cuestionan la calidad del 'copy', texto publicitario que pretende transmitir un mensaje de forma atractiva; otros se muestran ofendidos por la aclaración antes de la degustación; y hay quienes reconocen el restaurante y justifican la advertencia teniendo en cuenta el particular caracter de su dueño.

Este no es el único mensaje que se puede encontrar cuando se acude al local. Nada más sentarse a la mesa, una tarjetita con el logo y el nombre del restaurante, explica a los comensales la filosofía de El Sordo: una cocina tradicional incompatible con las prisas. «En nuestros platos, si falta un detalle, un ingrediente o el tiempo necesario, quedan huérfanos de su propia identidad. Queremos vender, sin cambiar la calidad por la velocidad. Deseamos servirle una comida hecha con cariño y esmero, como mandan los cánones de la cocina tradicional».

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