La cuestión pilló por sorpresa a Felipe Moreno durante la presentación del triangular, pero el club ya había trabajado para tener una respuesta afirmativa. El Real Murcia se ha inscrito para disputar la Copa Federación. Clasificado en la pasada Liga en séptimo lugar, participar en una competición que ya ganó en 2019 era su última vía para poder jugar la próxima edición de la Copa del Rey y aspirar, de ese modo, al aliciente deportivo y económico que supondría enfrentarse a rivales de la máxima categoría del fútbol español.
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Eso sí, los granas tendrán que empezar su andadura desde la fase autonómica. La temporada pasada el campeón fue el CAP Ciudad de Murcia después de superar tres rondas a partido único entre finales de agosto y principios de septiembre. El ganador de este año tendrá por delante otras cuatro eliminatorias a partido único más la final. Debería llegar a las semifinales para lograr una plaza para la primera ronda de la Copa del Rey, en la que están FC Cartagena, Yeclano, Águilas y Deportiva Minera.
Hay que señalar que el UCAM CF y el CD Cieza ya están clasificados para la fase nacional. Esta contará en total con 32 equipos, de los cuales 20 saldrán de esta previa regional. Para los de Fran Fernández supondría una oportunidad para lograr unos ingresos extras si superan las suficientes eliminatorias. Además, estos partidos adicionales podrían ayudar a aquellos jugadores con menos minutos del primer equipo o para los chicos del Imperial. En la temporada 2019-20 la competición potenció nombres como los de Dorrio, Silvente o Pedrosa.
Por otra parte, la presentación del IX Ciudad de Murcia también permitió hablar de los primeros pasos del equipo durante el verano y el presidente grana se mostró bastante optimista con el trabajo realizado hasta el momento. «Todo lo que tenemos hasta ahora me está gustando. Pienso que este equipo nos va a llevar muy alto. Falta todavía algún que otro jugador, pero estoy convencido de que estamos haciendo las cosas muy bien y de que vamos a ir para arriba», aseguró.
Mientras tanto, la plantilla inició ayer una semana más de entrenamientos con una doble sesión. Por delante quedan cuatro citas dentro de la preparación antes del comienzo de Liga el fin de semana del 25 de agosto. El miércoles tendrá los dos enfrentamientos seguidos ante Albacete y Hércules, en el Enrique Roca, y el sábado visitará El Rubial para enfrentarse al Águilas. Ya la próxima semana, jugará ante la UD Melilla el 14 de agosto, en el último amistoso esta pretemporada en Pinatar Arena, y el sábado 17 devolverá la visita al Hércules jugando en el Rico Pérez. Será la última prueba antes del debut liguero a domicilio contra el Sevilla Atlético.
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