El Real Murcia no aprovecha el buen juego y se desinfla tras los cambios

Un factor clave en los partidos, tanto a favor como en contra, sigue siendo el primer gol. A cualquiera le cuesta remontar. De hecho, el Real Murcia no ha perdido ningún partido en el que se puso por delante y solo había volteado el marcador una vez. Eso sí, fuera de casa, su zona de mayor confort por la dinámica de juego que se genera, con encuentros más abiertos, y por los resultados. Otra vez a domicilio tuvo que buscar la remontada. Falló en el gol que encajó en la primera parte en una jugada en la que el equipo quedó largo, dando espacio por dentro. Ahí, en posiciones interiores, sorprendió el lateral derecho Boñar. La defensa reculó y dio tiempo en la frontal para el golpeo de Niño, no solo el punta del Atlético B sino también su máximo realizador.

Otra vez, los granas tenían que levantarse tras un golpe. En las últimas semanas están siendo las derrotas en casa, pero anoche le tocaba una respuesta inmediata en Majadahonda y también supo reaccionar en este caso. En ese sentido, el jugador que nunca baja los brazos empató. Pedro Benito jamás desconecta y desde el suelo luchó el rechace de su propio remate. Ese 1-1 sin que pasara demasiado tiempo evitó que el partido se fuera enredando y que pudieran aparecer los nervios en un momento en el que la falta de puntos en casa estaba reduciendo mucho el margen de error en los choques a domicilio.

Sin que el Murcia perdiera la confianza ni viera la necesidad de hacer relevos al descanso, empezó la segunda parte con ímpetu para ponerse por delante en el marcador. Una fase de dominio que tenía que aprovechar con una banda derecha formada por Pedro Benito y David Vicente muy presente en ataque. Los partidos son detalles y también momentos. Y el conjunto grana desaprovechó los minutos de mejor juego. No supo traducirlo en el resultado, algo que ya le pasó la semana pasada.

El técnico grana empezó a mover el banquillo. Juan Carlos Real no participó en la fase decisiva del encuentro, ya cambiado a la hora de juego ante el Ibiza. Fran Fernández reemplazó como '9' a Flakus por Alcaina y Loren Burón entró, con lo que Davo pasó a jugar definitivamente por dentro. También entraron Pedro León y Loren. El Murcia de los delanteros pasó a ser el de los extremos, pero se fue desinflando y no solo no llegó el gol que le hacía falta, sino que volvió a encajar con mucha facilidad. Otra vez fue ante Adrián Niño, que ganó sin oposición la espalda de la defensa para dejar atrás a David Vicente y Saveljich. Sin eficacia en las dos áreas, volvía a estar en desventaja. Ya era tarde para mostrar una reacción.