Montoro abandona un vestuario revuelto y con futbolistas que no descartan cambiar de aires

El Real Murcia anunció ayer la rescisión de contrato de Ángel Montoro. El centrocampista, de 35 años, abandona el conjunto grana tras solo disputar 326 minutos en total, convirtiéndose así en la segunda salida del mercado de invierno tras Sergio Navarro. Fue uno de los fichajes de relumbrón de Javier Recio, director deportivo grana, aunque ha dado un rendimiento demasiado alejado al mínimo exigible para la Primera Federación.

El futbolista ha sido despedido sin acuerdo previo, aunque el club entiende que éste se podría alcanzar próximamente de forma amistosa sin la necesidad de que ambas partes acaben acudiendo a las instancias judiciales.

Álex Zalaya es otro de los futbolistas que podría abandonar la disciplina grana en las próximas horas al no contar para Pablo Alfaro, mientras que hay otros jugadores que han trasladado su malestar por su situación personal. Uno de ellos es Rodri Ríos, delantero que llegó el pasado verano procedente del Ceuta tras marcar 20 goles con la entidad norteafricana.

El sevillano no es titular indiscutible con Alfaro, aunque tampoco lo era con Munúa. De los 18 partidos de liga del equipo grana en solo 11 partió en el once inicial y suma ya 4 goles. Otros equipos, como el propio Ceuta, podrían estar interesados en un '9' que cuenta con 33 años y que estaba llamado a marcar las diferencias en el Murcia. Otro de los descontentos con su situación es Guarrotxena, que no jugó ni un minuto frente al Atlético B.

Gustavo Munúa, extécnico grana despedido tras once jornadas de liga, exige al club tres años de un posible contrato que podía haber alcanzado en el Real Murcia de cumplirse algunos objetivos establecidos previamente. Además de los 220.000 euros del primer ejercicio, Munúa considera frustrada su posibilidad de ascenso a Segunda, donde su cuerpo técnico recibiría 440.000 euros.

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