Adán Gurdiel: «Nunca me había quedado sin equipo»

Pese a que el Murcia descendió a la Segunda RFEF, Gurdiel no terminó «desgastado a final de temporada» y se quedó con ganas de más, pero su ambición y sus ganas de progresar en el mundo del fútbol le jugaron una mala pasada. «Quería esperar a un Primera Federación y al final todo quedó en nada». A partir de que se cierra el mercado y Adán Gurdiel se queda fuera de todas las plantillas, llegaron los malos momentos para el leonés.

«Nunca me había pasado lo de quedarme sin equipo y no poder entrar a ninguna plantilla. Han sido meses duros. En esos días de incertidumbre en los que das muchas vueltas y te hacen dudar de todo, incluso te dan ganas de tirar la toalla».

Para muchos considerado como un error por la anterior dirección deportiva que no ató al futbolista para el futuro, el propio Adán tiene claro que su presente estaría ligado al Real Murcia si él hubiese tenido relación contractual. «Me quedé sin contrato», lamenta el carrilero que en junio dejó de pertenecer a las filas del Murcia y se vio obligado a replantearse el futuro.

«Estoy convencido de que si nos hubiésemos quedado en Primera Federación me hubiesen renovado antes de terminar, por mí no hubiese habido ningún problema». El Murcia se estrelló en la reestructura de la Segunda División B y todavía los propios protagonistas buscan explicaciones. Gurdiel no sabría explicar qué fue lo que ocurrió porque había «gente muy buena y contrastada en ese vestuario».

Ahora, con el paso del tiempo, Adán Gurdiel guarda con mimo su etapa en la entidad centenaria de la Región de Murcia. «Al Murcia le tengo un cariño especial sobre el resto de clubes por el impacto que me causó todo», rememorando que fue su primera opción cuando se marchó del UCAM, rechazando ofertas superiores por vestir la grana.

Este fin de semana llega al Enrique Roca con la camiseta de El Ejido, equipo con el que firmó hace unas semanas para volver a disfrutar del fútbol y que se encuentra en la misma categoría que el Murcia, para volver a sentir el ambiente del coliseo murcianista y su gente, lo que espera que sea «algo especial» pese a que se viva desde el otro lado.

Por todo lo vivido en los últimos meses, Gurdiel no quiere escuchar hablar de futuro y de próximos objetivos, tan solo centrarse en el día a día. «El verano me ha enseñado a no mirar más allá. Si competimos bien todos los domingos, el futuro será mucho más fácil cuando termine la temporada».