Velázquez no altera su ritual, a pesar de estar ante el partido del año

Sobre las cinco menos cuarto de la tarde, cada uno de los jugadores convocados para el choque frente al Castilla ha arrancado su vehículo particular y, desde sus domicilios y tras comer con su familia y dormir una reposada siesta, han acudido al estadio Nueva Condomina. Es el punto de encuentro al que han llegado sobre las cinco de esta tarde, justo una hora y media antes de que dé comienzo el encuentro vital ante el filial del Madrid.

Es el ritual de siempre, el que no ha cambiado ni cuando el equipo grana se enfrenta al partido más importante de la temporada. Nada que no haga cualquier jugador del Real Murcia cada quince días. Hoy se va a disputar un partido en el que el Real Murcia puede cambiar la tendencia de los últimos años y hacer olvidar los descalabros recientes. Pero el técnico grana ha apostado por la normalidad para afrontar la primera final de la temporada y el último partido de la liga regular. Velázquez no quiere que haya nada que cambie respecto a las anteriores semanas: «Mi misión como entrenador es evitar que los jugadores tengan ansiedad. Los equipos que se salvan del descenso y que entran en 'playoff' son los equipos que más normalidad le dan a la semana y los que viven la semana con el mayor equilibrio posible».

Sin prohibiciones

El salmantino tiene su propio librillo: «El entrenador que está toda la semana metiendo intensidad y queriendo que pite el árbitro el inicio, luego consigue que a los jugadores no les vayan ni la cabeza ni las piernas. El que tiene la suficiente capacidad emocional para afrontar las situaciones con normalidad es al que luego le va bien. Durante la semana también ha sido todo normal». Por eso hoy no ha cambiado nada. Ni siquiera ha habido concentración previa en un hotel de la ciudad como en pasadas campañas antes de cada partido como local, ni el Real Murcia hará lo que hacen muchos equipos que juegan en casa y que se concentran para comer y descansar antes de los partidos.

Velázquez no lo necesita para motivar a sus jugadores: «Hay que comer bien y descansar bien. Y hoy llegaremos al partido como siempre, con una hora y media de adelanto y ya está. Nada diferente a otros partidos. Intentando disfrutar del momento. Y si pasamos, seguiremos disfrutando. Será la misma dinámica de funcionamiento, sin variaciones. Sería un error cambiar ahora. Un sinsentido, no sería consecuente». Los jugadores, incluso, han acudido esta semana a diferentes actos de las peñas con normalidad y medios de comunicación sin ningún impedimento por parte de Julio Velázquez.