El Murcia se suelta la melena en Alcoy

Fran Fernández hizo alguna reforma en su once titular respecto al partido de liga frente al Yeclano. La principal ausencia fue la de Pedro León, fijo en los dos primeros partidos ligueros, aunque en El Collao partió desde el banquillo. Y aunque la defensa y los dos mediocentros fueron los previsibles, la presencia de Pedro Benito en la delantera junto a Carrillo llamó la atención, aunque quizás el entrenador almeriense se dejó llevar por el mal estado del terreno de juego y la necesidad de tirar del balón en largo, de la necesidad de buscar las segundas jugadas y un fútbol más directo. Otra de las diferencias respecto a jornadas anteriores fue que el Murcia, al fin, tenía dinamita en el banquillo, argumentos para cambiar el partido si era necesario.

El partido fue intenso y bronco desde el primer momento, motivado principalmente por el estado del césped de El Collao. Y en este escenario los locales se sintieron más cómodos en los primeros minutos. De hecho dominaron más y lograron meter al Real Murcia atrás. Lo mejor para los granas fue que solo Jon Rojo, con un disparo lejano, intimidó a Gazzaniga en los primeros minutos. A partir del minuto veinte el Real Murcia perdió el miedo, se estiró y mandó más en el duelo. La medular grana comenzó a aparecer y Larrea, con un disparo lejano, asustó a Manu García, el exportero grana. El dominio visitante prosiguió en los siguientes minutos y Carrillo se probó desde lejos, aunque su disparo se fue desviado. El Murcia había despertado.

El choque parecía igualado, pero cualquier despiste le podía costar caro al conjunto grana, que se había puesto el mono de trabajo. Hasta que Larrea sacó petróleo en una jugada en el área del Alcoyano. El centrocampista grana recibió un manotazo de Primi, defensor local, y el colegiado señaló la pena máxima. El penalti lo transformó con seguridad Juan Carlos Real ante la ausencia de Pedro León y el equipo visitante se adelantó en un choque cargado de saques de banda y en el que el fútbol brillaba por su ausencia. El Real Murcia había recorrido la mitad del camino pero todavía le quedaba más de una hora de sufrimiento por delante ante un equipo construido para jugar el 'playoff' que se chocaba una y otra vez contra la firme defensa grana. El duelo parecía controlado, aunque cualquier detalle podía cambiarlo en un escenario como El Collao.

En la segunda mitad el Alcoyano saltó al césped con más intensidad que los granas. Además, Vicente Parras sentó al amonestado Primi y a Jon Rojo para dar paso a Farru y Lara. Pero lo mejor fue que antes de que el equipo grana terminara de asentarse de nuevo en el partido logró el 0-2. Juan Carlos Real provocó una falta en el lateral del área alcoyana y Kadete, de disparo directo, consiguió el 0-2 gracias en parte al despiste de Manu García, que se confió a la hora de atrapar el balón y se metió en la portería con él. El Real Murcia lo tenía todo de cara para lograr tres puntos vitales en un campo mítico y siempre difícil. El Alcoyano intentó responder con un disparo lejano de Lara, pero el equipo grana parecía completamente asentado en el choque, hecho al césped y al ambiente de un campo donde cada vez se escuchaba más a la afición grana.

El Collao terminó de enmudecer cuando Carrillo se aprovechó de un error de la defensa local para plantarse delante de Manu García y con insistencia y fe hacer el 0-3. Fue un premio a la entrega del delantero del barrio de El Progreso, que había hecho un trabajo oscuro durante todo el duelo. Fran Fernández aprovechó después para sentar a Real, con amarilla, y dar entrada a Alcaina, Moha, Boateng y Saveljich, necesitado de minutos de competición. Pero pese a la falta de rodaje de los jugadores llegados recientemente, el equipo de Fran Fernández siguió mandando en el duelo, con Moha dejándose ver en el centro del campo, mostrando algunas pinceladas de lo que puede llegar a dar a un equipo que en los últimos años le ha faltado un centrocampista con la visión de juego que tiene el ex del Barcelona B.

Los últimos compases del choque fueron tranquilos para el Real Murcia y sirvieron para que los últimos en llegar a la plantilla grana disfrutaran de minutos de rodaje; también para que la afición grana disfrutara sin miedo de un resultado final que debe servir como despegue para un equipo que en El Collao demostró que tiene argumentos para pelear seriamente por el ascenso y hacer soñar a sus fieles.