Se trata de una jornada trascendental para Mario Simón. El técnico manchego tiene en mente que la exigencia de un club como el Real Murcia es máxima y debe empezar a cosechar resultados positivos cuanto antes. La dirección deportiva avala a Simón y esta semana dio un paso adelante para que la directiva continuase con el voto de confianza hacia el actual entrenador, pero la única fórmula para que esa convicción siga intacta pasa por vencer mañana en el campo del Puertollano.
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Simón es consciente de que la presión forma parte del entorno de un Real Murcia que no está donde se merece. A algunos de los jugadores, cabizbajos y muy tocados después de la derrota en Alicante contra el Hércules y la posterior bronca al salir del Rico Pérez, parece pesarle la tensión que se genera en un histórico del fútbol español cuando no se gana. En cualquier caso, el responsable del banquillo grana lanzó ayer balones fuera contra ese nerviosismo. «No hemos notado más presión esta semana que en cualquier otra. Está claro que cuando el resultado no es favorable los días avanzan de una forma diferente a cuando se gana. Yo creo que cada uno se marca su presión, desde que vinimos aquí sabíamos la obligación y la exigencia que teníamos», dijo.
No obstante, y a pesar de que la afición parece disconforme con la continuidad del preparador manchego, Mario Simón aseguró que se siente arropado por parte de la directiva y el departamento que lidera Manolo Molina solo le transmite tranquilidad. «No he tenido ninguna orden o llamada que me haga dudar de ello, con la dirección deportiva trabajamos día a día y estamos en el mismo camino», aseveró cuando recordó que pese a que las victorias no llegan están «haciendo las cosas bien y nuestro trabajo va a dar resultado», detalló.
Aunque desde parte de la directiva señalan que algunos futbolistas están rindiendo por debajo de lo esperado y que es urgente retocar la plantilla en el próximo mercado invernal para lograr el objetivo a final de temporada, Simón tiró una lanza a favor de los chicos que conforman el vestuario del Real Murcia y no quiso entrar en polémicas. «Estoy contento con la plantilla y el rendimiento es muy bueno», apuntó el entrenador grana cuando recordó que son los detalles los que les «están privando de sumar mucho más y tenemos que intentar controlarlos».
Por otro lado, quiso destacar el técnico que aunque puede que sus jugadores no tengan experiencia en grandes entidades deportivas como la centenaria pimentonera, sí que cuentan con «un nivel de ilusión, humildad, concentración y ganas de hacer cosas muy importantes, que también ayuda».
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Consciente de que su tiempo en el Murcia puede acabar muy pronto si no se consigue sumar de tres mañana contra el Calvo Sotelo de Puertollano, Mario Simón alegó en su defensa que no quiere perder tiempo con «lo que no depende de uno mismo» y prefiere centrarse en el trabajo diario que tiene por delante para revertir la racha de un partido ganado de los últimos siete.
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