Marcos Mauro y Rofino, de subalternos a jefes

Son las dos parejas que ha tenido Alberto. El primero fue a más al comienzo de la segunda vuelta y el segundo tomó el testigo para asentarse en las últimas semanas. El Málaga pondrá a prueba cómo funcionan juntos a estas alturas de temporada. Hasta ahora habían coincidido de inicio cuatro veces: en la jornada 3, en la 5, en la 6 y en la 19. Y Mauro jugó al lado de Zalaya en la jornada 2. Los antecedentes no son positivos, sin victorias y con varios goles encajados, pero el rendimiento también se vio afectado por la fragilidad como bloque a principio de curso ante Córdoba, Sanluqueño o San Fernando. Quitando algún accidente, el grupo se ha mostrado más maduro. La otra opción pasaría por el murciano Andrés, cuarto central.

Durante muchas jornadas, Alberto había conseguido ser un defensa dominante sin un juego duro. Se imponía en el área y fuera perseguía a los delanteros rivales. En un equipo ya amenazado por los apercibidos, apenas veía tarjetas hasta que eso cambió en las recientes semanas, recibiendo tres en los últimos cuatro partidos. No estará en el gran duelo de este fin de semana, pero estará limpio para los dos compromisos seguidos en casa, también de máxima exigencia, ante la AD Ceuta y el Castellón.

La buena noticia para Alfaro es que mañana Alberto González será la única baja del equipo más allá de las ausencias por lesión de Rojas e Imanol, que sigue cumpliendo plazos para su reaparición. El técnico confirmó que Loren Burón está listo para volver con el equipo después de tres jornadas fuera por problemas físicos. No juega en Liga desde el día ante el Sanluqueño, en el que recibió un fuerte golpe en la cadera. Poco a poco ha ido ejercitándose con normalidad y esta semana también participó en un partido de entrenamiento ante el FC Johor, de Malasia.