Los Minions contraatacan

Casi como un drone invisible oculto por la OTAN en el Museo del Prado, nos ha llegado julio, que viene a ser el equivalente al viernes de los meses del año. Algunos ya habréis empezado las vacaciones y a otros nos toca esperar otras tres decenas de días para mojarnos los pies en el mar, aguardando turno como un jubilado en la carnicería, nerviosos y con ganas de que pase el tiempo rápido. Y para eso nada mejor que cuatro estrenos. Os aviso que si sois padres hay un par que os hará recordar el dicho de «Cría cuervos y te sacarán los ojos».

Los años setenta son felices para la puesta en escena de películas. Esos coloridos calidoscópicos, esos cardados imposibles y esos pantalones de campana dan mucho juego en el cine, que al fin y al cabo es una orgía de imágenes. Pues en esa década prodigiosa (si la recuerdas es que no estuviste allí) se sitúa la película de animación 'Minions, el origen de Gru'. Caso evidente de como los secundarios suplantan al protagonista en las sagas si tienen más éxito que él.

Y es que estos inclasificables bichos amarillos (a los que les cogí mucho cariño en un viaje a Galicia gracias a un entonces niño llamado Mario), vuelven a la carga con sus dosis de irreverencia, humor y desinhibición. Aquí vemos a un Gru de niño, empezando a hacer sus maldades acompañado de los minions, en todas sus divertidas variantes. Id a verla porque es tan raro aburrirse viéndola como ver una bandera arcoíris en un mitin de VOX.

Malena Alterio, una de las actrices con más vis cómica de España (de casta le viene al galgo, no olvidemos que su padre es el inconmensurable Héctor Alterio), protagoniza la comedia española 'Mamá, no enredes', haciendo de madre, claro. Una madre divorciada, con dos hijos en la post adolescencia, que no ven con buenos ojos que ella se dedique a ligar en las mismas aplicaciones de citas que ellos, y deciden boicotear esas relaciones.

Aunque las gracias son más o menos previsibles, y situaciones similares ya hemos visto en 'Lolo' (2015) o en unas cuantas series, es agradable de contemplar y perfecta para empezar el verano de buen humor, el que no tienen estos vástagos que sufrirían menos si su madre sólo tuviera vínculo emocional con el Satisfyer.

'La isla de Bergman' es una película festivalera con aires existencialistas. En Faro, Portugal, precisamente la misma población donde vivió el director sueco Ingmar Bergman (los gafa pastas se licúan sólo de leer su nombre), se instala un matrimonio que ya más que una pareja son una costumbre. Pero los problemas del primer mundo les acechan. Y es que en un pueblo turístico, viviendo en un chalet frente al mar, los problemas no pueden ser de otro tipo.

Tim Roth encabeza el reparto de un film que mira siempre por el rabillo del ojo la obra cinematográfica del sueco. Pero sus dos historias de parejas (que no de amor) paralelas, están más cerca de la levedad de 'Bajo el sol de la Toscana' (2004), o la crudeza de 'Cegados por el sol' (2015) que del delicado clásico de Bergman 'Secretos de un matrimonio' (1974).

La otra de hijos desagradecidos es una de risa francesa, que protagoniza la estupenda Josiane Balasko, la Florinda Chico gala, por su ternura, hechuras y comicidad. Aquí hace de madre de un par de hijos mayores que no hacen caso a sus padres. Y la manera de que les presten atención es mentir y decirles que les ha tocado la lotería.

La miseria humana se expresa con cinismo aquí, y vernos reflejados en esos hijos malnacidos nos hará sonreír a pesar de gastar una comicidad tan precisa como unas gafas de farmacia.

Lo más destacable de la semana es el retiro de uno de los mejores compositores de cine de la historia, John Williams, a la tierna edad de 90 años. Premio Princesa de Asturias, ganador de 5 Oscar, nominado 52 veces a esos premios, creador de 55 bandas sonoras y autentica alma de tantas y tantas películas. A todos nos resuena en la memoria 'Tiburón', 'Indiana Jones', 'Superman', 'Star Wars' o 'Harry Potter'. Pero mis favoritas son las de 'E.T.' y la poco valorada 'Atrápame si puedes'. El cine no volverá a sonar igual.

Que tengáis una semana, y un julio, de cine.

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