Orihuela invertirá 2,5 millones en subsanar la falta de medios materiales en la recogida de basura

El servicio de recogida de basuras de Orihuela, aquejado de una falta crónica de medios materiales, empezará a subsanar en parte sus carencias a partir del próximo año. El Ayuntamiento desembolsará de sus ahorros 2.555.000 euros en una nueva modificación de crédito con cargo a los remanentes líquidos de tesorería, la quinta que elevará a Pleno el nuevo equipo de gobierno PP-Vox. Una cantidad de dinero que se destinará a obtener doce nuevos camiones, más de 2.000 contenedores, una hidrolimpiadora y otras tantas sopladoras.

Desde el equipo de gobierno aseguran que se trata de «la mayor inversión realizada en esta área desde que se asumió la gestión directa del servicio en 2012». Antes de llegar al pleno ordinario de septiembre, la propuesta de gasto deberá pasar por Comisión Informativa. En este sentido, la concejal del área, Rocio Ortuño, ya ha pedido este jueves el respaldo unánime de todos los grupos políticos.

La edil también ha reconocido que la flota no podía continuar como venía estando; abonándose millonarias cantidades en la reparación de camiones que, en algunos casos, superan con creces los 10 años de edad. Así, explicó que, de ese más de dos millones y medio de euros, 1,3 millones irán a la adquisición de seis camiones nuevos que se sumarán a los que ya se adquirieron tras la Dana de 2019 y que retirarán a otros seis de los más antiguos. Estos últimos, incidió Ortuño, ya solo se usarán en ocasiones excepcionales, como por ejemplo, para reforzar la costa en verano. De este modo, ya al menos 11 de los 19 camiones de la flota son de reciente incorporación.

A estos nuevos camiones de recogida de residuos se sumarán otros seis camiones basculantes de caja abierta para la recogida de podas y enseres valorados en 300.000 euros. Un servicio que, por ejemplo, en la costa, donde más demanda tiene, es deficitario. Todos los nuevos vehículos, no obstante, aseguran fuentes municipales, no estarán disponibles como mínimo hasta el próximo verano. De momento tiene que salir adelante en Pleno la propuesta de gasto, después salir a concurso estas adquisiciones y, solo cuando se adjudiquen, empezará la cuenta atrás para que lleguen estos vehículos, cuya fabricación solo empieza una vez se formaliza el contrato.

Lo que sí estará disponible antes serán los nuevos contenedores. El litoral, además, se espera que sea el más beneficiado. Con una acusada falta de contenedores, la intención de la Concejalía es que la mayoría de los 2.000 nuevos que se compren, valorados en 800.000 euros, vayan a parar allí. Por el momento, serán islas que tendrán fracción resto, plástico, y papel y cartón. Asimismo, la mayoría de estos contenedores serán de carga lateral, adaptados a los vehículos de recogida más modernos. «De este modo renovamos la mitad del censo ya que en la actualidad tenemos 3.800 contenedores lo que supondrá un importante refuerzo en la zona costera y en la recogida selectiva en origen», destacó Rocío Ortuño.

La concejal, sin embargo, manifestó que todavía no está en previsión implantar pronto el contenedor marrón para la recogida de la fracción orgánica, obligada ya por ley a todos los ayuntamientos. En este sentido, Ortuño espera que se pueda pensar en planificar su implantación una vez se eleve a Pleno el Plan Local de Residuos. Un documento que, en el pasado mandato, hizo mucho hincapié en su aprobación el exconcejal del área y hoy asesor del equipo de gobierno, Dámaso Aparicio.

La 'cesta de la compra' impulsada por el nuevo ejecutivo la cerrarán unos 80.000 euros para la adquisición de una nueva hidrolimpiadora, «ya que la que presta actualmente el servicio, sobre todo en el casco urbano, data de 1998 y está al final de la vida útil», destacó Ortuño. Y, por otro lado, habrá otros 55.000 euros destinados a adquirir nuevas sopladoras eléctricas.

En estos primeros compases del nuevo gobierno de Pepe Vegara, la salida de modificaciones de crédito ha sido una constante. Con esta última modificación ya son más de 17 millones los que se han sacado de la hucha municipal para «tapar agujeros» (sobre todo facturas impagadas) y realizar inversiones como esta. Eso sí, hasta el momento las partidas más grandes han sido las destinadas a RSU. En este sentido, la concejal destacó que, gracias a estas dotaciones económicas extra no presupuestadas en 2018, han acabado con la deuda que mantenía con el Consorcio Comarcal de Residuos, que llegó a ascender a los 2,3 millones en el pasado mandato.

La concejal también señaló que ya se ha aprovisionado el gasto para lo que resta de este año. Unas cuentas en las que, además, se incluye un millón sólo en concepto del nuevo impuesto estatal que grava los residuos impropios, o lo que es lo mismo, los que se depositan en el contenedor incorrecto. En un inicio, ese gasto se cifró en 700.000 euros, pero el equipo de gobierno ha decidido aprovisionar más en previsión de que esa cifra se pueda quedar corta.

«Esto supone poner en orden las obligaciones adscritas en el área. Hablamos de una inversión necesaria reclamada por los vecinos de Orihuela y, de forma especial, por los trabajadores del área que van a mejorar su calidad y la seguridad en el desarrollo de su trabajo», destacó Ortuño, que también ha señalado la mejora como «una inversión financieramente sostenible». Un punto nada baladí, puesto que ha sido el motivo de peso para que Intervención diera su visto bueno a este nuevo desembolso de remanentes. Ortuño, en este aspecto, ha agradecido precisamente al área económica y a la interventora «el trabajo realizado durante estos meses para poder llevar a Pleno este asunto y a los trabajadores el servicio que tan pacientemente están aguantando para que sean dotados con los mejores medios para realizar su trabajo».

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