Vaya, que ha muerto Jamila Al-Shanti, viuda del cofundador de Hamás y ella misma parte integrante de la organización. Una mujer de principios. Una ... mujer muy fea también. Una especie de señorita Trunchbull yihadista. El jueves murió a los 68 años víctima de un ataque aéreo israelí. No voy a lamentarlo. Aunque sí que haya emancipación de las mujeres en ciertos ámbitos. Mejor que frieguen.

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Daría igual, se quedarían pariendo 'babies' yihadistas. Pero podría yo estar equivocada y llena de prejuicios porque como ella misma dijo cuando entró en el Parlamento como miembro de Hamás, hay muchas ideas equivocadas sobre la organización, «especialmente sobre cómo trata a las mujeres». Es verdad que en el ataque a Israel el trato fue el mismo a las mujeres, a los hombres o a los niños. A los israelíes. La señora muerta decía: «Vamos a mostrar al mundo que somos civilizados. Que somos mujeres civilizadas». Se ve que el patriarcado musulmán no les ha dejado.

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