Después de ver lo ocurrido en Francia, la jugada que les queda a PP y PSOE está clara. Otra cosa es que quieran verlo. Una democracia parlamentaria sana se asienta en dos grandes partidos: uno de izquierda moderada y otro de centro derecha. Se les ... puede llamar como se quiera. Los dos grandes partidos franceses han obtenido una representación –ojo, entre los dos– del 7%. Están muertos. Y es ahora cuando los de aquí deberían hacer valer el refrán de 'cuando las barbas de tu vecino...'. ¿Lo harán? Y sobre todo, ¿lo harán bien? Somos muchos los que, visto su comportamiento en los últimos años, tenemos nuestras dudas.
Publicidad
Feijóo. No tiene un pelo de tonto y lo primero que ha hecho es ofrecer a Sánchez un pacto de Estado para que gobierne la lista más votada. Esa solución tan sencilla como eficaz anularía el papel de la extrema izquierda, la extrema derecha y los independentistas, que son las formaciones que nos llevan a maltraer y que impiden la verdadera recuperación con sus ocurrencias, paridas y estridencias. Feijóo ha estado listo porque ahora la pelota está en el tejado de Sánchez. No soy optimista al respecto. Si los dirigentes de PSOE y PP fueran listos llegarían a ese acuerdo: que el otro es el más votado, te abstienes, le dejas formar gobierno y luego le marcas a la hora de legislar. Le apoyas en lo razonable y en lo que quede consensuado y le votas en contra en lo que no veas claro. Lo que vienen haciendo en Alemania desde hace décadas, donde los dos grandes partidos han llegado a gobernar coaligados. ¿Por qué eso no es posible aquí? Si la miopía política les impide ver esto y hacerlo, llevan el mismo camino que en Francia. El momento de Podemos pasó, aprovechó el descontento del 2010, pero se ha disuelto por sus contradicciones. Ahora es el de Vox. Tomen nota de lo de Francia, insisto. Pero ojo, el pacto de Estado por la gobernabilidad no debe de ser un cambalache en el que PSOE y PP se repartan el poder para que su parroquia mantenga sus carguicos, cuidado. Deben optar por una auténtica regeneración que incluya dos aspectos a mi juicio fundamentales:
1. Gobernar para la gente. Si seguimos con la electricidad disparada, la inflación a niveles estratosféricos, saliendo como estamos de una pandemia y con una guerra por delante, la gente va a explotar. PSOE y PP, que son los que gobiernan, deben aliviar el sufrimiento de la gente ya. Si las eléctricas, los bancos, las grandes cadenas de supermercados, ganan un poco menos no pasa nada. El Estado no puede consentir que ciertas cadenas jueguen con su stock, cuando ya no hay huelga de transportes, para generar pánico, que la gente acumule y luego subir los precios. Yo me andaría con ojo, la instrumentalización de la legítima huelga de transporte por parte de sectores ultras fue un claro aviso a navegantes.
2. Mejorar el nivel de sus cuadros. Tienen copando cargos importantes a gente poco preparada, más preocupada de su propia supervivencia que por gestionar con tino por y para los votantes. Así que estos, hartos de incompetencia, mentiras y mala gestión, escuchan los cantos de sirena de los profetas del descontento que lo tienen muy, pero que muy fácil. Es hora de pedir unos mínimos para ocupar un cargo, qué menos que haber cursado bachillerato y tener un trabajo. La política no es un oficio, debe ser una dedicación por un tiempo. Desde las juventudes de los partidos generamos tipos que no tienen otra dedicación ni a dónde volver y eso es ruina para todos. O dignifican la política y gobiernan para la gente o partidos de nuevo cuño, aprovechando el descontento, los acabarán barriendo.
Publicidad
Tienen que entenderse de manera urgente. Si PSOE y PP llegan a dicho pacto de gobernabilidad y comienzan a aliviar el castigo que sufre el pueblo llano, tendrán salvación. Si siguen convertidos en agencias de colocación absolutamente distanciados de la gente que les vota, vendrán los de verde y les comerán la tostada. Unos se han dedicado a blanquear a la extrema izquierda, los otros, a la extrema derecha, y así nos va. Nos estamos jugando el futuro de Europa que son palabras mayores, que lleguen los ultras que son antieuropeístas en Francia, en Hungría y en otros países solo nos asegurará el fin de la UE. Si PSOE y PP no se ponen de acuerdo, lo de Francia, aquí, nos va a parecer una broma.
Infórmate con LA VERDAD: 1 año x 29,95€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.