Borregada

El estudio arroja resultados poco sorprendentes. Por ejemplo, una de cada tres personas ve series «porque están de moda», por postureo (yo solo veo series cuya duración contando todos los capítulos y temporadas sea aproximadamente de hora y media). De cualquier cosa se puede hacer un postureo, incluso la de creer, por un tiempo, ser 'trans'. Por raros y extravagantes que seamos, ninguno nos escapamos de ser rebaño en alguna cosa. Yo mismo entro en el 78% de españoles que según la empresa Estrella de Galicia consideran que es malo que la mayoría nos vea diferentes. Malísimo no, lo siguiente. En la peli 'Pulp Fiction' el personaje interpretado por Samuel L. Jackson le dice al interpretado por John Travolta que va a dejar de ser asesino a sueldo para convertirse en un pastor itinerante que predique al Señor. «Quieres ser un vagabundo», le contesta Travolta. Dime que quieres ser un diferente, artista tal vez, y yo te digo que lo que pretendes es ser un marginal.

Pensar diferente no te cierra muchas puertas: no hay puertas. Solo alguna ventana por la que arrojarse. Ser de la inmensa minoría que consume una cerveza muy concreta puede arrojar resultados económicos si la empresa lo tiene claro, pero a ti te convierte en un pringado cuando solo te queda el chino para intentar encontrar, con éxito descriptible, tu cerveza a deshoras. La moraleja de la encuesta es finalmente, ay, errónea, y esto ya sí que es mera publicidad: cuanto más pienses por ti mismo, más alto llegarás. Muchas veces será así. Y más veces de esas muchas no lo será, en absoluto. Nadie triunfa por ir contracorriente, sino porque tiene el talento sobrehumano para conseguirlo, a pesar de todo y todos. Para un gran transformador de su tiempo que puede surgir, para un Real Madrid que pueda resistir, hay millones de pensamientos críticos que duermen debajo de los puentes.