Multa de 200 euros por no declarar en el juicio a su presunto violador

La juez le advirtió en varias ocasiones del alcance de su decisión, pero ésta era firme. Una joven de Abarán, que en 2006 denunció al novio de su suegra por presunta violación, asumió ayer una multa de 200 euros -la mínima que impone la Ley en estos casos- por negarse a declarar en el juicio. La víctima, que rompió a llorar en la sala y no ofreció ninguna explicación a su negativa, se enfrenta además a la apertura de un proceso judicial por un delito de desobediencia al tribunal. Ninguno de estos argumentos la impulsó, sin embargo, a romper su silencio.

Los hechos que ayer sentaron en el banquillo a Salvador L.M., propietario de un bar de Abarán, se remontan, al parecer, al 25 de noviembre de 2006. La joven denunció, en su momento, que aquel día acompañó al novio de la madre de su novio a un terreno de huerta cercano a la carretera de Blanca para darle de comer a unos animales. Una vez allí, la fiscal sostiene que el acusado trató de convencer a la chica para mantener relaciones y que, ante su negativa, se abalanzó sobre ella y presuntamente la agredió sexualmente.

El acusado, que se enfrenta a una pena de 9 años de prisión, negó rotundamente las acusaciones que, aseguró, estaban motivadas por su negativa a seguir entregándole dinero al hijo de su pareja y a la mujer de éste. «Ese mes ella me pidió 80 euros para pagar el agua y yo le dije que la jubilación no me daba para más», explicaba el procesado. «Me dijo que me iba a acordar».

Un policía local de Abarán aseguró ayer que la joven le confesó, en un episodio de presuntos malos tratos, que su marido le había obligado a denunciar falsamente al acusado «para sacarle el dinero». El marido de la víctima negó ayer en el plenario que la denuncia fuese falsa. «Si fuera mentira ella no estaría tan hundida como está».