Pastora Vega: «Separarme fue muy duro, pero vale la pena escuchar al corazón»

Hace tan sólo unos meses que Pastora Vega y Juan Ribó hicieron pública su mediática relación amorosa. Y justo cuando el aluvión de críticas parecía estar cediendo, se lanzaron a compartir escenario en una obra de teatro que ya desde su título levanta suspicacias, 'Una relación pornográfica'. El sábado, a las 22.30 horas, la función, dirigida por Manuel González Gil, llegará al Auditorio Parque Almansa, escenario de la programación oficial del 41 Festival Internacional de Teatro y Danza de San Javier. Hablamos con la actriz andaluza, feliz por su regreso a los escenarios.

-¿Qué hay de especial en esta obra que la trajo de vuelta al teatro?

-Habla de una historia que me interesa mucho: el amor, el miedo al compromiso y al dolor. Además, el personaje que interpreto es un bombón, un regalo para cualquier actriz de mi generación.

-Además, llega en un momento en el que le puede resultar fácil identificarse con el papel...

-¡Sí, el personaje me va como un guante! No me había pasado nunca y me da una sensación más de disfrute que de trabajo. Por lo que he vivido en el último año, sé muy bien de lo que habla mi papel. Todo llega en el momento en que tiene que llegar. Para mí ha sido una maravilla.

-Interpreta a una mujer cincuentona que busca sexo en una publicación de contactos...

-Hoy en día es la forma que adoptan personas de todas las edades para conectarse con otros sin compromisos. Es una cosa rápida en la que no se pierde el tiempo. Buscas en Internet alguien que reúna ciertas características, quedas con él, te gusta y ¡pum!

Juan Ribó, que está sentado a su lado y la mira embelesado, rebate. «A mí eso me parece una desgracia. Nuestra sociedad está viviendo una especie de decadencia. Por eso las relaciones de ahora son más sintéticas. Como nuestros personajes, que sólo buscan sexo. Nada de irte a tomar una copa y hacer el amor en un hotel». Pastora asiente: «Lo único que ellos quieren es hacer realidad una fantasía sexual que no pueden satisfacer por sí mismos. Aunque después empiezan a surgir sentimientos».

-¿Y usted cree que puede terminar en amor una relación que nació como algo puramente sexual?

-Es el riesgo que se corre. Pero la vida es eso. A veces puede pasar que te enamoras de alguien y sigues la fórmula que nos han vendido a todos de que el amor tiene que convertirse en una estructura familiar, aunque luego resulte que con esa persona no tienes la comunicación necesaria. Pero también ocurre al revés. En una relación puramente sexual pueden aparecer unos sentimientos y una unión tan llena de energía que no se puede medir ni controlar.

Disfrutar un beso

-Usted y Juan Ribó son pareja dentro y fuera del teatro... ¿cansa?

-Al revés. Trabajar con la gente que quieres y admiras es mucho mejor que trabajar con gente que no conoces o con quien no hay química. Es un error pensar que estar mucho tiempo con la persona que quieres desgasta.

-Y con el escándalo mediático que ha provocado su relación, ¿fue difícil decidirse a compartir escenario?

-A nuestra relación se le da una importancia desproporcionada. Yo fui pareja de Imanol (Arias) durante 25 años y he interpretado a su hermana, a su ex... Esto es un trabajo, independientemente de que, tras caer el telón, te vayas con ese señor a cenar o a lo que sea. Mientras haya química, trabajar con tu pareja es exactamente igual que trabajar con cualquier otro.

-Pero no me va a negar que se disfruta más al besar en escena al ser querido que a un compañero cualquiera.

-Ja, ja, ja. Obviamente, pero pasa lo mismo si es un compañero que te gusta, aunque no sea tu pareja.

A Juan le hace gracia la respuesta. Se ha levantado a la ventana para fumar, pero sigue con atención la entrevista. «Ella tiene razón. Además, en la actuación hay que disfrutar cualquier beso para darle algo de realidad; si no, el público no se cree nada», tercia mientras da una calada al pitillo.

Merece la pena

-Pastora, últimamente se define como una mujer valiente. Es de suponer que lo dice por su ruptura con Imanol Arias...

-Fue una situación muy difícil, pero merece la pena escuchar al corazón sea el momento que sea y con lo que tengas alrededor. Es importante estar conectada contigo misma y acostarte todos los días consciente de que la vida que tienes te hace feliz. Y saber si puedes reconocerte en la persona con la que compartes tu existencia, o si, por el contrario, esa persona se está secando, amargando, entristeciendo y restando alegría a lo que le rodea. Con este tipo de decisiones siempre lo pasas mal.

-¿Cómo lleva las críticas del mundo del corazón, las acusaciones...?

-No seguimos los programas del corazón, aunque de alguna manera siempre acabamos por enterarnos de lo que hablan de nosotros. ¡Y no pasa nada, ya lo tenemos más que superado! Además, mi relación actual con Imanol es estupenda... Pero prefiero no seguir hablando de ello.