El Moratalla baja a Tercera (0-1)

La derrota de ayer ante el aspirante Poli Ejido (0-1) certifica el descenso a Tercera División de un Moratalla que se despide de la categoría con honor, después de haber vendido muy caro el fracaso deportivo que supone no haber podido mantener la categoría.

En cualquier caso, la gente despidió a su equipo con aplausos en el Casa Felipe y hay que admirar el trabajo de una directiva que lleva luchando por el fútbol de Moratalla desde el año 2000. No obstante, su presidente, Santiago Fernández, no puede más y está dispuesto a tirar la toalla. Si lo hace, el club está llamado a desaparecer.

En la primera parte, el Moratalla dominó de principio a fin a un Poli Ejido que no se esperaba el vendaval murciano. Unos 45 primeros minutos donde el conjunto local fue muy superior. Y se notó sobre todo en la cantidad de ocasiones de las que disfrutaron. La primera llega de pies de Álex Arias pero su remate no encontró puerta. El francés Florian, en los minutos 22 y 25 respectivamente, pudo adelantar a los murcianos. Su primer remate, un fuerte disparo, se marchó fuera, y el segundo, un remate de cabeza, rozó el gol. Pero los moratalleros no se adelantaron. Y lo terminaron pagando. Y muy caro.

En el minuto 35 llega la primera ocasión almeriense, obra de Gregory con un gran tiro pero Manolo responde con una prodigiosa intervención. Esa fue la única ocasión del Poli en esta primera parte. Un balance ofensivo tan triste como intrascendente pues lo que importa es ganar cuando el árbitro pita el final. Y el Poli Ejido ganó.

En la segunda mitad, los andaluces se pusieron las pilas y a los cinco minutos Pichardo tuvo la ocasión de adelantar a los celestes poniendo en aprietos a Manolo, que tuvo que emplearse a fondo. Parecía como si Óscar Cano hubiese inyectado a sus jugadores la medicina necesaria para ir a por el partido. No obstante, el conjunto local estaba muy bien posicionado y en el minuto 53 un lanzamiento de Florián volvía a poner en apuros a Valle. Minutos después, con el partido agonizando, llegaba el mazazo. Marcó Gregory.