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42.000 exámenes, tres toneladas de papel, 8.741 alumnos, 430 profesores, 32 asignaturas y miles de horas de codos y estudio. Las grandes cifras de la Ebau 2024 de la Región, la última que mantiene el 'modelo pandemia', no le dicen nada a Carmen, alumna del IES Infante de Murcia, quien solo tenía ayer otro número en la cabeza: 13,157, la nota de corte de Medicina del pasado año. «Llevo una media muy alta, pero aún así nunca se sabe», comentaba nerviosa antes del primer examen a las puertas del Aulario Norte, donde a las ocho y media de la mañana se concentraban centenares de estudiantes. Nervios a flor de piel, atascos, esquemas manoseados y coloreados de fosforescente, filas que parecen no avanzar... 8.741 estudiantes murcianos repetían el ritual que acompaña a las pruebas de acceso a la Universidad cada año, en las que se juegan la nota media que les dará entrada a la carrera que quieran estudiar. Adriana Gómez, un manojo de estrés, aguardaba la cola para entrar en el Aulario Norte de Espinardo con sus compañeros del IES Salzillo de Alcantarilla. En pie desde las cinco y media de la mañana, «por si acaso», centraba su atención en el enésimo repaso de la Generación del 27. «Hoy es el cumpleaños de García Lorca, cae seguro», apostaban Francisco y Pablo, alumnos del IES Floridablanca de Murcia. Acertaron.
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Más de 7.500 estudiantes procedentes de todos los institutos de la Región realizarán hasta el viernes la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (Ebau). La primera jornada la dedicaron a las materias obligatorias: Lengua y Literatura, Historia de España o Historia de la Filosofía, e idioma. En el examen de Historia de la Filosofía fue necesario cambiar una pregunta corta por otra (y, en las aulas donde no fue posible, puntuar doble la alternativa) por un error en la estructura. Hasta el viernes se incorporarán otros 1.194 alumnos que se han matriculado en la Ebau, bien para subir su nota de convocatorias anteriores, bien porque proceden de ciclos formativos de grado superior y están exentos de examinarse de la fase general.
El alumnado estaba convocado a las 8.45 de la mañana en las doce sedes que se reparten por toda la Región: cuatro en el Campus de Espinardo de Murcia, dos en el de la Universidad Politécnica de Cartagena, dos en Lorca y una en los municipios de Cieza, Caravaca, San Javier y Jumilla.
En las pruebas, que coordina la Universidad de Murcia para toda la Región, participan 80 miembros del personal técnico, de gestión, administración y servicios de la UMU y la Universidad Politécnica de Cartagena, 12 orientadoras que asistirán al alumnado con necesidades educativas especiales, y unos 70 estudiantes voluntarios para apoyar a quienes se examinan. Una vez finalicen los exámenes, comenzará la fase de corrección, en la que participarán 430 profesores. Las notas se publicarán el próximo 12 de junio. Las tres principales novedades de esta convocatoria son que la Fase General permitirá elegir entre Historia de España e Historia de la Filosofía, desaparece la materia de Cultura Audiovisual y se incorporan otras diez más entre las opciones que tiene el alumnado para elegir.
Los estudiantes que necesitan adaptaciones y tiempo extra puede examinarse en sus propias sedes sin tener que desplazarse a las de Murcia y Cartagena, como ocurría antes. Para ello, se han repartido en las diferentes sedes 15 ordenadores y tabletas para estudiantes con dificultades en la escritura, y cuatro alumnos dictarán el examen por la imposibilidad de escribir. Además, se han desplazado vocales evaluadores a centros sanitarios para que dos estudiantes puedan hacer las pruebas mientras están hospitalizados.
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Para evitar atascos, especialmente en los accesos al Campus de Espinardo de la UMU, se ha reforzado el transporte público, especialmente la frecuencia del tranvía, y se ha pedido colaboración a la Delegación del Gobierno para que la Guardia Civil controle de manera especial el tráfico en la autovía de acceso al campus. A pesar de esas medidas, se registraron atascos a primera hora de la mañana.
La vicerrectora de Coordinación de la UMU, Alfonsa García Ayala, destacó que «los 42.000 exámenes estarán corregidos el miércoles, lo que supone un gran esfuerzo de todos los profesores y es una muestra del músculo del sistema universitario murciano». El director general de Universidades, Antonio Caballero, que estuvo a primera hora en una de las sedes de Espinardo, en Murcia, reivindicó, como defiende su partido, la organización de una prueba única nacional desde el próximo curso «que se ajuste al distrito único».
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