Ver fotos
Ver fotos
El teletrabajo, que se impuso con claridad durante los primeros meses de la pandemia, ha resultado una experiencia satisfactoria para la mayoría de quienes tuvieron que acogerse a esta fórmula, pero generó situaciones de estrés, alargó la jornada laboral y fue percibido por muchos empleados como menos productivo. Así se recoge en un estudio del Consejo Económico y Social (CES) sobre las repercusiones de la crisis sanitaria en el bienestar de las familias, presentado ayer.
Publicidad
Solo el 22% de las 516 personas encuestadas para este informe –todas ellas padres y madres con hijos en edad escolar– teletrabajaban antes de la pandemia. Ese porcentaje se elevó al 58% con el confinamiento decretado a mediados de marzo de 2020. Tras la relajación de las restricciones se volvió en buena medida a la presencialidad, aunque todavía un 42% de los entrevistados continuaban desarrollando al menos parte de su actividad laboral desde casa en el momento de la encuesta, realizada entre diciembre de 2020 y el pasado mes de marzo.
Alrededor de siete de cada diez personas se mostraron satisfechas «con la oportunidad de trabajar desde casa», aunque «cuando se preguntó por cuestiones más concretas, las respuestas fueron menos optimistas», matiza Laura Espín, profesora del departamento de Anatomía Humana y Psicobiología de la UMU, y una de las cinco autoras del estudio del CES. Así, el 45% no ganó tiempo libre por trabajar desde casa, frente a un 37,3% que sí pudo disfrutar de más periodos de ocio o descanso. De hecho, un 54% de los encuestados sintieron que su trabajo se expandía y ocupaba tiempo que podrían ocupar con la familia y amigos.
El estudio revela, además, que se mantiene la brecha de genero: las madres ganaron menos tiempo libre que los padres, sufrieron más estrés y tuvieron más dificultades para conciliar. En todo caso, el balance global es positivo: el 66,6% de los encuestados destacan que el teletrabajo les permitió poder cuidar de su familia, y un 51,8% subraya el ahorro económico. El estudio ha sido coordinado por María Dolores Hidalgo, catedrática del departamento de Psicología Básica y Metodología de la UMU. Junto a ella, también lo firman Micaela Martínez, María Fuster, María Pilar Martín y Laura Espín.
¡ÚLTIMO DÍA! 3 meses x 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.