El PP lograría hoy la mayoría absoluta en la Región de Murcia por el desplome de la izquierda

De celebrarse hoy unas elecciones autonómicas, los ciudadanos de la Región de Murcia darían la mayoría absoluta al Partido Popular, que se impondría con 23 escaños de los 45 que componen la Asamblea Regional, esto es dos más que los que obtuvo en los comicios celebrados en mayo de 2023. Así se desprende del Barómetro de invierno del Cemop (Centro de Estudios Murciano de Opinión Pública).

La victoria del PP se explica por el desplome de la izquierda, tanto del Partido Socialista, que perdería dos escaños con respecto a las elecciones de 2023 hasta bajar a los 11, como de Podemos, que pasaría de dos a un escaño.

Según el estudio, el Partido Popular es el único que tendría un saldo neto de votantes a su favor. Los dos nuevos escaños que obtendría se explican por un trasvase de electores tanto de la izquierda como de la derecha del propio PP. Se estima que al PSOE le 'robaría' unos 10.000 votantes netos, mientras que de Vox recibiría unos dos mil votantes. Además, los datos que maneja el Cemop revelan que es la formación política que mayor tasa de fidelidad de sus votantes mantiene, con una alta capacidad de movilización de nuevos electores y de antiguos abstencionistas que, de celebrarse ahora los comicios, votarían por el PP.

La ruptura del Gobierno de coalición entre el Partido Popular y Vox del pasado julio favorecería a ambos partidos, según la encuesta. Si bien el PP sería el partido más beneficiado, la formación que lidera José Ángel Antelo en la Región obtendría sus mejores resultados si se celebrasen hoy unas elecciones autonómicas. Vox sumaría un 3% de votantes, que se traduciría en un escaño y lograría así los diez diputados en la Asamblea, a solo uno del PSOE (11).

Pese a los resultados positivos, el electorado de Vox presenta una alta tasa de volatilidad y es que sólo el 67% de los encuestados que estarían dispuestos a votar a Vox hoy, lo habían hecho en mayo de 2023 (frente al 78% del PP o al 84% del PSOE). Esto implica que sigue siendo una formación donde el voto no se atiene tanto a la identidad partidista sino de clima político y económico, y, por tanto, donde las coyunturas influyen en la continua entrada y salida de electores.

El aumento de electores en el PP y Vox no se explica sin la pérdida de voto que experimentaría la izquierda, que cronifica una situación que viene constatándose en los últimos estudios del Cemop. La tasa de fidelidad del PSOE es más baja que la del PP o la de Vox, pero solo se traduce en una pérdida de unos 10.000 votantes hacia el PP.

Hacia su izquierda, Podemos y Sumar, el PSOE también realiza importantes transferencias, cerca de 6.000 electores socialistas de 2023 irían a las filas de estas formaciones, pero compensa estas pérdidas brutas con captaciones desde esas dos fuerzas y desde otros partidos sin representación en la Asamblea por valor de un poco más de 9.000 electores, lo que produce para los socialistas una captación que compensa en cierta medida las transferencias realizadas hacia el Partido Popular. No obstante, el mayor problema que sufre el Partido Socialista en la Región de Murcia no está en el trasvase de electores entre partidos, sino en la desmovilización.

Por otro lado, el Barómetro de invierno constata el desplome de Podemos, que se había mantenido hasta ahora estable y materializa un escenario de incertidumbre en el espacio político a la izquierda del PSOE. La ruptura con Sumar en diciembre de 2023 no tuvo consecuencias en la Región de Murcia respecto a los datos de intención de voto. Podemos mantenía su cuota en la Asamblea, la que había conseguido en mayo de 2023, y Sumar apenas se manifestaba como opción diferenciada por los entrevistados. En este último Barómetro, sin embargo, Podemos reduce significativamente su cuota electoral en un 30% de su electorado, y pierde uno de los dos escaños de 2023. Podemos pierde cerca del 50% de sus electores de 2023: un 14% se transfiere al PSOE y un 36% opta por Sumar, que no lograría representación en la Asamblea.

La opinión crítica de los ciudadanos hacia la clase política empeora. El Barómetro de invierno de Cemop vuelve a colocar a los líderes políticos y la política en general como el principal problema para los murcianos. Los datos con respecto a la encuesta de otoño empeoran, ya que el porcentaje de ciudadanos que lo señalan como su mayor preocupación ha aumentado en casi seis puntos, al pasar del 20,5 al 26,3%.

Por contra, el desempleo y la inmigración, que continúan siendo el segundo y tercer asunto que más preocupan a los murcianos, caen ligeramente. En el caso del desempleo esta reducción es de medio punto, hasta bajar al 10,8%, mientras que la inmigración cae un 1,5% y se sitúa en el 9,4%.

En menor medida, también preocupan la situación económica (6,8%), la movilidad (4,5%), el Mar Menor (4,3%), la sanidad (4,3%) y el agua (3,3%), entre otros. El Gobierno regional preocupa al 1,7% de los encuestados.

Por tramos de edad, los mayores de 65 años son quienes peor valoran la situación política (30,2%) y más se preocupan por la inmigración (11,4%), mientras que los jóvenes son quienes menos relevancia dan a la clase política (17,7%), pero a quienes más importa el desempleo (10,9%), seguido de la inmigración (10%) como el tercer mayor problema.

Además, en este Barómetro, se hizo hincapié en la percepción del cambio climático, sobre todo tras la dana de finales del pasado octubre que dejó más de 200 muertos. En este sentido, el 74,1% de los encuestados declaran sentirse bastante o muy preocupados, además, el 71,8% considera que existe una clara relación entre el aumento de fenómenos meteorológicos adversos y el cambio climático.

También se hizo una entrevista en profundidad sobre la inmigración. La creciente percepción de esta como una amenaza en términos económicos, culturales y de seguridad lleva a una polarización acerca de si el Gobierno de López Miras debería destinar recursos a atender las necesidades de las personas que llegan a la Región: el 46% se mostró a favor frente al 51,6% que se mostró en contra.

El tercer tema al que se le ha dado también mayor importancia en las preguntas es el de la vivienda, en concreto sobre el nivel de conocimiento acera de las tres medidas que está desarrollando el Gobierno regional (la línea de aval joven, ayudas para comprar una vivienda protegida y ayudas para comprar viviendas en municipios pequeños). En términos generales, el grado de conocimiento y satisfacción con estas medidas es notable y todas rozan el 8 sobre 10.

Pese a que el Partido Popular mejoraría sus resultados y obtendría la mayoría absoluta, la valoración de los murcianos a la gestión del Gobierno regional no consigue llegar al aprobado y se mantiene muy similar a la del anterior barómetro. El 42,6% de los encuestados la califica de regular (un 0,6% más que en otoño), el 24,8% como buena (esto es un 4,7% más) y el 19,6% la perciben como mala (lo que supone un 0,7% más).

En cuanto a la oposición, el trabajo del PSOE es el peor valorado, con un 55,2% de ciudadanos que lo califican como malo o muy malo, lo que supone un empeoramiento del 8,8% en este parámetro. En cuanto a Podemos, también crece el porcentaje de encuestados que valoran su labor negativamente: pasa del 46,1% en otoño al 54,7% en el último estudio. Solo Vox contiene las malas cifras, ya que las valoraciones negativas obtenidas han decrecido un 0,1% y se sitúan en el 42,2%.

En cuanto a la nota que los ciudadanos otorgan a los líderes políticos, a nivel nacional ninguno lograría el aprobado y todos empeorarían sus resultados. Quien más se acerca al 5 es Alberto Núñez Feijóo, con un 4,2, le sigue Santiago Abascal, con un 3,7, tras quien se situaría Yolanda Díaz, con un 2,8 y Pedro Sánchez, con un 2,2.

A nivel autonómico las cifras son ligeramente mejores aunque ningún líder logra el aprobado. Fernando López Miras es quien más próximo se queda, al mantener el 4,9 que ya tuvo en el barómetro anterior, cuando sufrió una caída de casi medio punto. Le siguen María Marín de Podemos, con 3,5, la única que obtiene una mejora en los resultados (+0,1 puntos), José Ángel Antelo de Vox, con un 3,3, quien también experimenta una caída del 0,4 con respecto a otoño, y José Vélez del PSOE, quien se queda en el 3,1 (-0,1).

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