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El Pleno de la Asamblea Regional rechazó este martes la moción de Vox que solicitaba la eliminación de todas las subvenciones públicas a los partidos ... políticos de la Región. PP, PSOE y Podemos unieron sus votos contra la iniciativa en un debate en el que, además, sacaron a relucir la investigación iniciada por la Fiscalía Anticorrupción por supuesta financiación irregular del partido de Abascal, lo que se ha denominado el 'caso Huchas'.
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El diputado encargado de defender la propuesta de Vox fue Alberto Garre, presidente de la Comunidad por el PP entre 2014 y 2015. Durante su discurso, hizo varias veces alusión a su mandato, señalando que ya entonces se negó a aprobar una Ley de Participación Institucional, que le pidieron hasta en tres ocasiones patronal y sindicatos. «Y luego, a los pocos meses, cambiamos de presidente y apareció en la portada de LA VERDAD un empresario muy significativo diciendo que teníamos al mejor presidente de la Región que hemos tenido nunca [en referencia a Pedro Antonio Sánchez, a quien no citó]».
«Tenemos que eliminar de los presupuestos todo el gasto innecesario y volcar los recursos en aquellos que verdaderamente lo necesitan, en ese 30% de murcianos que están asfixiados, en el umbral de la pobreza», explicó Garre, quien recordó que él gobernó con siete consejeros «y no hubo uno menos porque no me dejaron», dijo, recordando de nuevo a quien fue su sucesor en San Esteban y a quien quiso destituir sin éxito.
El portavoz del PP en la Asamblea, Joaquín Segado, respondió a Garre y aclaró que los partidos políticos no reciben un solo euro en los Presupuestos de la Comunidad. Los que reciben son, de la Asamblea y para funcionamiento interno, los grupos parlamentarios. Unas subvenciones que Vox también cobra «y que no se han eliminado en ninguno de los cuatro parlamentos autonómicos que este partido preside».
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Segado recordó que la moción se debatía «al día siguiente de que se conozca que este partido está siendo investigado por donaciones opacas y por recibir un préstamos de 9,2 millones de euros de un banco húngaro».
La más dura fue María Marín, portavoz de Podemos. «¿Quién necesita una mísera subvención de la Asamblea cuando recibe cinco millones de euros de donaciones anónimas y préstamos de 9,2 millones de euros del banco de un amigo del señor Viktor Orban, que a su vez es amigo del señor Putin?», se preguntó irónicamente Marín, quien señaló que en la Región «Vox trae leyes al dictado de los grandes magnates que lo financian, como la reforma de la Ley del Mar Menor».
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«Vox es un partido vendido a las grandes élites reaccionarias del mundo mundial, al trumpismo, Elon Musk, Orban, Netanyahu y Putin», indicó.
Por parte del PSOE, el diputado Juan Andrés Torres Escarabajal, que siguió la línea de los anteriores oradores en relación a la financiación de Vox y el 'caso Hucha'. Además, afeó que «lo primero que hizo Vox en el Gobierno de la Región, con el apoyo del Partido Popular, fue crear un pedazo de chiringuito como el Comisionado de la Transparencia».
Una vez rechazada la moción de Vox, fue aprobada la enmienda a la totalidad del PP, que expresa el apoyo de la Asamblea «al modelo de financiación de los partidos políticos previsto en la legislación española, que garantiza la competencia democrática entre los partidos, reduce la dependencia de intereses privados, primando el interés público, refleja la voluntad popular expresada en las urnas, favorece el pluralismo político, que facilita la transparencia y el control del gasto y que fomenta la estabilidad del sistema político».
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El Pleno de la Asamblea acordó, con los votos de PP, PSOE y Vox, instar al Gobierno regional a la construcción de la autovía que comunique Lorca, Caravaca y Venta del Olivo.
La moción partió del PSRM, cuyo diputado Alfonso Martínez Baños exigió al Ejecutivo de López Miras que acepte la condonación de deuda, lo que liberaría fondos para poder acometer la financiación de esta infraestructura. Víctor Martínez-Carrasco (PP) indicó que la autovía cuesta aproximadamente 500 millones de euros, que la Comunidad no puede afrontar «por la infrafinanciación», por lo que apuesta por establecer fórmulas de colaboración público y privadas. Ignacio Arcas, de Vox, propuso que la autovía llegue hasta Venta del Olivo, mientras que Víctor Egío, de Podemos, votó en contra al considerar que «no existe demanda real por parte de los vecinos para esta autovía, para lo que sí existe demanda es para un nuevo hospital en Lorca».
Asimismo, la Cámara aprobó la alternativa del Partido Popular a una moción inicial de Podemos en la que reclama al Gobierno de España que financie las obras de la circunvalación oeste y sur de Santomera. Esta doble variante sustituiría al tramo urbano de la RM-1, la 'autovía del bancal'. PSOE y Vox votaron a favor de la enmienda popular. Podemos se abstuvo y pidió que la variante sur pase al norte para no cruzar la huerta.
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