Tres días de luto en Lorquí por la muerte de una mujer en un atropello múltiple

El Ayuntamiento de Lorquí ha decretado tres días de luto oficial, según confirmó el alcalde, Joaquín Hernández, tras la muerte de una vecina de la localidad en la noche del pasado sábado en un atropello múltiple ocurrido en el municipio vecino de Molina de Segura. La víctima y otras dos amigas, que resultaron heridas graves, cruzaban un paso de peatones y fueron arrolladas por un conductor, que dio positivo por alcohol. El siniestro se produjo en torno a las 23.00 horas en la avenida de la Industria, en dirección Madrid, pasado el centro comercial Vega Plaza, en un paso de peatones regulado por semáforo que, en apariencia, estaba en rojo para los coches.

Las tres mujeres, Loli, una profesora jubilada de 63 años; Salvadora, de 60, y Juani, de 62 años, todas vecinas de Lorquí, salieron esa tarde de sábado por Murcia, «era algo que hacían habitualmente las tres», recuerda una familiar de Salvadora.

Para evitar los problemas de aparcamiento que hay en la capital, decidieron dejar su coche estacionado en Molina de Segura, en las inmediaciones del gimnasio Pedro Villa, una zona habilitada para el aparcamiento de turismos. «Desde allí, cogieron un taxi y se fueron a Murcia. Pasaron la tarde las tres juntas, regresaron por la noche en otro taxi a Molina de Segura. Se dirigían a coger su coche y cuando cruzaban un paso de peatones, un conductor se saltó la señal en rojo y las arrolló», explica la allegada de una de las víctimas.

Los primeros indicios, tras la inspección ocular realizada por la Policía Local de Molina, indican que el conductor, Miguel R. L., de 65 años, circulaba en un Mercedes, un todoterreno Clase M de color gris, no vio que el semáforo estaba en rojo y las arrolló. «No existen marcas de frenada en la calzada», refleja el atestado policial.

El Centro de Coordinación de Emergencias 112 recibió varias llamadas alertando del siniestro en la N-301, entre la redonda de Vega Plaza. Al lugar se movilizaron efectivos de la Policía Local, una patrulla de Policía Nacional y tres ambulancias, dos Unidades Móviles de Emergencias.

A pesar de los esfuerzos de los sanitarios, Loli murió en el acto por la gravedad de las heridas y los facultativos solo pudieron confirmar su fallecimiento. Las otras dos mujeres fueron trasladadas al hospital Virgen de la Arrixaca. Juani ingresó en la UCI con un politraumatismo craneal y su pronóstico es muy grave. Por su parte, Salvadora presenta un coágulo en la cabeza, una fractura de la pelvis, la rotura de tres costillas y permanece a la espera de ser intervenida quirúrgicamente.

Por su parte, Miguel, el conductor, un jubilado, natural de Lorquí y residente en la pedanía de Llano de Molina desde hace nueve años, permaneció en el lugar del siniestro y fue sometido a un test de alcoholemia, dando un resultado positivo.

Los agentes lo detuvieron por un delito de homicidio imprudente y dos de lesiones y contra la seguridad vial por conducir bajo los efectos de bebidas alcohólicas. El arrestado fue trasladado a dependencias de la Policía Local y, posteriormente, puesto en libertad a la espera de ser citado por un juzgado de instrucción de Molina de Segura.

«No es un domingo cualquiera, ha sido terrible», indicó una vecina cerca del edificio donde residía Loli, al lado de la biblioteca municipal de Lorquí.

En el tanatorio de la localidad, el dolor de familiares y amigos era inenarrable. «Una tragedia descomunal», indicaron con la voz rota algunas de las decenas de personas que acudieron al velatorio de la mujer fallecida, a la que trasladaron al tanatorio a primera hora de la tarde, tras practicarle la autopsia en el Instituto de Medicina Legal de Murcia.

Hoy se oficiará la misa funeral. Rotos por el infausto siniestro, sus familiares y allegados apenas podían articular palabras por la inesperada pérdida de un ser tan querido, «una gran mujer», en palabras de muchos vecinos de Lorquí

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