Los encierros de Moratalla echan el broche por todo lo alto

Con la traca final de fiestas y la interpretación del himno se cerró anoche el programa de las fiestas del Cristo del Rayo. A media tarde, desde la finca del Arenal, salían las seis vacas de la ganadería de Juan Carlos Cascales que participarían en el último traslado por vereda hasta la entrada al casco urbano por la carretera de Calasparra. A estas reses se unieron más tarde, otros tres astados: una vaca de la ganadería de El Rellano y otra vaca y un toro de la ganadería de Beteta. El ganado se recogió sobre las nueve de la noche, al ritmo de la charanga El Rodeo, acompañando a la mayordomía en la que han participado las peñas.

Juan Soria, alcalde de Moratalla, hizo una valoración muy positiva de las fiestas, «ha ido todo muy bien y habría que destacar la gran participación de vecinos y visitantes que hubo el pasado sábado con todas las calles llenas de gente». El primer edil sólo lamentó la grave cogida que tuvo lugar al final del primer encierro y también hizo referencia a los nueve incidentes que hubo en el encierro del sábado. «En cuanto al ganado que ha participado en los encierros y la organización, tengo que manifestar que todo el pueblo está muy satisfecho del trabajo realizado este año; donde también hemos contado con dos puntos de asistencia sanitaria para poder atender a quienes han tenido algún tipo de incidente durante los encierros».

Soria estuvo acompañado por la consejera de Turismo, Cultura, Juventud y Deportes, Carmen Conesa, que asistió al último de los tradicionales encierros por vereda. Por la mañana tuvo lugar un encierro infantil con vacas mansas que partieron desde la finca del Arenal a las 9.30 horas y que llegaron al pueblo recorriendo las calles de costumbre.