El Castillo, la ermita de San Roque y la iglesia de San Pedro se recrean en un mural de grandes dimensiones en la plaza diáfana existente frente al futuro Palacio de Justicia, entre las calles Galdo, Padre Morote y Padre Carlón. Lo realiza el muralista Iván Molina y la obra, que ha sido consensuada con los vecinos, representa a una niña mirando hacia la barriada. La concejala socialista Ángeles Mazuecos recordó ayer que esta actuación está financiada por el Gobierno de España, dentro de la convocatoria de subvenciones para el impulso de la Agenda 2030.
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Detalló que también dentro de esta iniciativa se han creado nuevas zonas verdes accesibles en la confluencia entre las calles Zapatería y Gomélez, en el barrio de San Juan, donde antes había un solar lleno de maleza, y en la plaza de San Vicente, en la que se han plantado nuevas especies arbustivas. Dentro de ese mismo proyecto, está pendiente completar las áreas arboladas de la calle Puente Alberca y la renaturalización del cabezo de Las Palas.
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