Las altas temperaturas provocan en Lorca una caída de ventas del 20% en las rebajas

En los últimos días del periodo de rebajas los comercios tratan de desprenderse de la mayor cantidad de 'stock' posible con descuentos de hasta el 70%, pero los clientes «ya están pensando en la temporada de primavera». El único sector que ha tenido buenos resultados estas rebajas ha sido el de prendas y calzado deportivos. «Hay cosas que sabemos que no se van a vender aunque las rebajemos a tope» porque son muy pocos los que compran ahora un abrigo, unas botas o un edredón «para guardarlos para el año que viene». Intentarán eliminar esos productos de sus almacenes en octubre en una feria outlet en el centro de la ciudad, que en años anteriores ha tenido muy buena aceptación, anunció el representante de los comerciantes.

Ya ha comenzado el goteo de ventas de artículos nuevos en tienda, pero en marzo el pequeño comercio espera un «boom» con la llegada de la Semana Santa y de la época de ceremonias por excelencia.

La Unión Comarcal de Comerciantes animará a sus socios a reinventarse para fidelizar al cliente con un curso de formación en redes sociales que se llevará a cabo en las próximas semanas. Aseguró que no son muchos los comercios que cierran, pero sí los que «piden a los fabricantes cada vez con más cautela para evitar el stock» y esto comienza a hacer mella en la producción, sobre todo de calzado y prendas de vestir. Algunos «se han puesto las pilas, han perdido la timidez» y suben vídeos de sus colecciones a las redes sociales con detalle de precios y tallas disponibles que «funcionan muy bien, es una forma gratuita y divertida de promocionarse», afirmó.

Una de las que se ha enganchado a esta modelo de venta es Vicenta López de la tienda de moda y complementos 5th Avenue. Ha encontrado en Instagram la mejor fórmula para exhibir sus artículos, hasta el punto de que se ha convertido en «fundamental» en su negocio. «Todos los días subo vídeos y 'reels' probándome la ropa o mostrándola en un perchero y recibo mensajes de clientas que me piden que se las reserve. Se vende todo, la gente está más pendiente de Instagram o TikTok de lo que podemos imaginar». Reconoció que «si tuviera más tiempo para dedicarme a las redes o para tener más activa mi página de venta 'online' me iría aún mejor».

De rebajas le quedan muy pocas prendas y aunque las está liquidando a 10 y 15 euros las clientas «ni las miran, la campaña de invierno es cada vez más mala» y por eso ha aprendido a «pedir a los fabricantes sobre la marcha». Se centra plenamente en la nueva colección de primavera que ya llena los percheros de su establecimiento.