Una juez investiga a una empresa mixta de Beniel por el nuevo fraude del AVE

Los hechos que están siendo investigados en este asunto concreto se refieren a unas obras de reposición de tuberías de agua potable y canalizaciones para saneamiento, que se ejecutaron en el año 2012. Estas infraestructuras hidráulicas se habían visto afectadas por la construcción de la plataforma de la alta velocidad entre Crevillente y Murcia, concretamente en el tramo de Colada de la Buena Vida y la ciudad de Murcia.

En un auto dictado por la titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Murcia, Marta Alba Tenza, en el que se resumen los motivos de imputación de una veintena de nuevos sospechosos, se deja constancia de que esa obra se facturó por 38.539 euros, y se abonó con fondos de Adif, pese a que presuntamente no habría llegado a ejecutarse. Esta afirmación, sin embargo, parece contener una inexactitud, ya que los informes periciales realizados por los investigadores de la Guardia Civil y Vigilancia Aduanera, así como los de una auditora externa, indican que el trabajo se hizo realmente, aunque existen sospechas sobre si pudo hincharse la factura.

Un antiguo alto directivo de esta mercantil de capital público y privado está siendo investigado.

Fuentes de la empresa mixta Sermubeniel mostraron ayer su absoluta disposición a colaborar con la investigación y señalaron que, de hecho, ya remitió toda la documentación sobre esa obra a la Comandancia de la Guardia Civil de Alicante, hace unos meses, cuando fueron requeridos para ello. Incluso se habrían aportado fotografías de las distintas fases del trabajo. Por ello, apuntaron a que se trata de «un problema de estimación de costes» y no de un intento de malversación.

Igualmente dejaron constancias de que cualquier beneficio que pudiera haberse obtenido de esa tarea pasa a engrosar las cuentas de la mercantil semipública, por lo que ese dinero, aún en la hipótesis de que se hubiera producido una sobrefacturación, «no va al bolsillo de nadie».