La investigación del crimen de la turista singapurense Audrey Fang, en abril del pasado año, en Abanilla sigue sumando nuevas pruebas. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Cieza acaba de recibir un nuevo informe del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses de Madrid que revela que, en los muslos y en la ropa interior de la víctima, se hallaron ADN de dos varones distintos. Por el momento, según explicaron fuentes judiciales, no se han cotejado las muestras obtenidas con las del único acusado, Mitchell Ong.
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El informe especifica que en el análisis del cuerpo y las bragas de la víctima no se hallaron restos de semen y que los ADN masculinos se apreciaron en una «baja cantidad». La abogada María Jesús Ruiz de Castañeda, que asumió recientemente la defensa del sospechoso, considera que esta prueba podría abrir la puerta a la implicación de otra persona en el 'crimen del bancal'.
Esta parte ha solicitado numerosas pruebas a la instructora, entre ellas la obtención del volcado del teléfono móvil de Mitchell, Ruiz de Castañeda explica que, hasta la fecha, esa prueba no se ha logrado debido a que el móvil de su cliente no es europeo, pero remarca que su obtención es posible y necesaria.
La defensa aguarda la obtención de otra retahíla de pruebas antes de que Mitchell acude a declarar ante la jueza, algo que hasta la fecha no ha hecho. Su abogada sostiene que el acusado reconoce que llevó a la turista hasta ese paraje de Abanilla, pero niega que cometiera el crimen.
El abogado Manuel Martínez, que ejerce la acusación particular en representación de la familia de la víctima, hace hincapié en que en breve se cumplirá un año del ingreso en prisión de Ong y éste aún no ha prestado declaración. «Todavía no ha arrojado luz ante un montón de evidencias y de pruebas directas que lo incriminan en el asesinato de Audrey Fang», remarca esta parte, que considera el informe de ADN una prueba «nimia» e «insignificante».
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Frente a ella, remarca la acusación particular, existen en la causa «pruebas directas de cargo que enervan la presunción de inocencia del acusado». Martínez alude concretamente al hecho de que Fang viajó a España a instancias de Ong y que el viaje fue sorpresivo para la familia de la víctima. Remarca que las diligencias realizadas por la Guardia Civil revelan que Fang estuvo esos días únicamente con Ong y que «estando instalados en Alicante no se explica cómo este señor la lleva a una zona oscura de Abanilla y la deja allí, apareciendo muerta justo en el sitio donde la deja».
El letrado hace hincapié, además, en el hecho de que la víctima había nombrado meses atrás al supuesto autor del crimen, Mitchell Ong, beneficiario de sus ahorros en caso de fallecimiento.
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