Eva Rodríguez, el reto y la pasión como señas de identidad

Madre de una niña de casi cuatro años, Eva no duda en afirmar que independizarse tan joven ha influido en su personalidad y en su forma de afrontar las situaciones que se ha encontrado. También admite que le ha marcado «mucho» vivir en diferentes ciudades dentro y fuera de España, además de las personas que se han cruzado en su camino todos estos años.

Formada en gestión comercial y marketing, hace unos días IKEA España anunció su nombramiento como nueva directora y coordinadora de la división de restauración y alimentación de la empresa de origen sueco en nuestro país. Un nuevo proyecto que se centra en impulsar la gama «de productos de calidad, saludables y asequibles».

Lo ha conseguido tras desempeñar durante 19 años funciones de responsabilidad en diferentes departamentos; de hecho, se incorporó el mismo año que la tienda abrió su sede en el municipio de Murcia.

Eva empezó en el Bistró y la Tienda de Alimentación Sueca en la capital murciana, desde donde la trasladaron al departamento de ventas en San Sebastián de Los Reyes (Madrid). Tres años después, aterrizó en el mismo departamento de Jerez (Cádiz). Fuera de las fronteras españolas, ha ocupado puestos de relevancia en las áreas comercial y de estrategia de negocio en la República Checa, Eslovaquia y Hungría.

«A lo largo de mi trayectoria en la compañía, más que enfrentar obstáculos como mujer, he vivido una experiencia de crecimiento y aprendizaje; de gran compromiso con la igualdad y la diversidad, todos valores que forman parte de mi ADN y de la empresa», relata. También ha sido un desafío «y una motivación» trabajar con diferentes personas y equipos diversos, que le han preparado para asumir nuevas oportunidades laborales.

Tiene claro que para alcanzar las metas personales no hay que tener miedo, de jóvenes sobre todo, a trabajar con un criterio propio, «sin temor a equivocarse», y sobre una base de «valores sólidos y con un propósito». Un consejo que no duda en ofrecer a esas jóvenes que son el futuro laboral del país.

Eva Rodríguez advierte de que el éxito «rara vez es inmediato» y que para llegar donde la persona se propone hace falta «constancia y pasión», sin olvidar el «aprendizaje constante», porque nada es permanente en la vida. «Esta es la mejor herramienta para afrontar los cambios que surgen» a lo largo de la existencia, subraya.

A esta treintañera que roza los cuarenta no le duelen prendas reconocer que su lema personal es «rodéate de los mejores», esas personas, que, como a ella le ha ocurrido en sus años de vida, le han enseñado a ser cada vez mejor. Y lo han hecho, afirma, en unos casos «retándome» cuando aparecía una oportunidad; y en otros, «apoyándome cuando lo necesitaba».

Cuando habla de aficiones, su trayectoria profesional se cuela por las rendijas. «Me encanta viajar y aprender de la gastronomía de los diferentes lugares que visito como una parte de su cultura». Reconoce que intenta reproducir en su casa algunas de las recetas que ha probado y le han gustado, pero «no siempre con éxito». Eso sí, la ilusión que pone en el proceso nunca le falta, como en todo lo que hace.

Como pulmones le pone a las canciones que interpreta en el coche, sobre todo de Viva Suecia, Arde Bogotá y Second. «Cantar a voces es, sin duda, lo que más me relaja». Aunque le gusta sobre todo el rock, lleva una época «muy de indie español».