Una reacción inesperada (3-0)

El fútbol tiene cosas extrañas y en la tarde de este domingo se demostró una vez más. Los más optimistas no podían esperar una reacción semejante de La Hoya después de sucumbir en los tres últimos partidos de forma estrepitosa, con una derrota el pasado miércoles, en Lepe, por tres goles a cero. Pero en esta ocasión fue el equipo entrenado por Rafa Muñoz, El Palo, el que se llevó tres goles del Artés Carrasco, una goleada que sirve a los de Campos para tomar aire y salir del último puesto de la tabla.

Afición, jugadores y cuerpo técnico respiraron y tomaron energía con este triunfo para las próximas jornadas. Aunque el resultado 'no saca al equipo de pobre', sí al menos de esa última posición que ahora ocupa el Lucena, próximo rival en el Artés Carrasco.

A pesar del resultado, el partido no fue bueno. Los dos equipos jugaron a casi nada, pues el balón les quemaba en los pies a los jugadores. De esta forma, el patadón fue la tónica general a lo largo de todo el partido, un choque de guante blanco. Prueba de ello fue la escasa presencia de tarjetas, con solo una para el visitante Nacho. Curiosamente hubo un expulsado en el bando local, y no fue un jugador, cuando el colegiado mandó a la grada al delegado de equipo, Manolo Jiménez, que se hizo un lío con un cambio y el árbitro entendió que estaba perdiendo tiempo cuando su equipo ganaba por dos goles a cero.

El encuentro empezó con el equipo visitante dominando el juego, tal vez porque estaba convencido que en casa del colista tenía la obligación de logar un resultado positivo. Fue demasiado atrevido desde el principio y muy pronto pagó las consecuencias. A los cuatro minutos ya estaba por debajo en el electrónico, y eso hizo que su entrenador tuviera que echar mano del plan B demasiado pronto.

Lo cierto es que en la primera jugada de ataque de La Hoya Lorca encontró el premio del gol. Todo se inició por la banda derecha del ataque lorquino, donde Pau Franch se aprovechó de un mal paso de su marcador Igna, el jugador valenciano centró al segundo palo y Hugo Rodríguez fusiló al guardameta Pol de tiro cruzado.

El gol hizo que el rival de los lorquinos tuviera que arriesgar más de la cuenta para conseguir el empate, pero no contaba con una defensa firme que en este partido no estaba dispuesta a dar concesiones. Se puede decir que en los primeros 45 minutos no hubo ni un disparo entre los tres palos de la portería defendida por Raúl Moreno. La acción con más peligro fue una falta directa botada por el central Nacho que terminó por encima del larguero.

La Hoya Lorca sí que dispuso de alguna que otra ocasión para aumentar su ventaja, pero en todas esas acciones el balón no encontró la portería de Pol. El juego se desarrolló en el medio campo, con dos equipos más preocupados de alejar el balón de sus dominios que de hilvanar jugadas de cara a puerta. El pecado del conjunto lorquino fue jugar poco por las bandas. Así, con más pena que gloria terminó una primera parte que hizo, y mucho, que se aburrieran los pocos espectadores que acudieron al estadio.

Tras el descanso, el cuadro visitante solo dispuso de una gran acción para hacer el empate, esta se produjo a los quince minutos cuando Salvi se quedó solo ante el portero, se hartó de balón y lo envió fuera junto al poste. Ese fue el único despiste importante que tuvo la defensa lorquina durante todo el partido. Esa acción hizo que los jugadores blanquiazules se percataran de lo peligroso que sería el gol del empate.

Siete minutos después llegó el segundo de la tarde y la puntilla para El Palo, equipo que se equivocó cuando pensó que sería fácil ganar al colista. El gol llegó tras un córner, el central Antonio López se hizo con el balón y fusiló la portería malagueña entre una maraña de jugadores. Fue un gol que terminó con las ilusiones del equipo de Rafa Muñoz, mientras que en el banquillo contrario se notaba el peso que se quitaba de encima José Miguel Campos, tal vez porque veía muy cerca la victoria de su equipo.

El resto de partido fue más relajado, incluso el equipo lorquino se permitió el lujo de marcar un tercer gol para redondear la cuenta. Higinio fue el autor de disparo raso y ajustado en el que nada pudo hacer el portero para evitarlo. Eso sí, a pesar de la victoria, La Hoya Lorca sigue una jornada más en puestos de descenso, aunque ahora a dos puntos de la zona de salvación y a solo uno del puesto de promoción.