R. M.
Sábado, 7 de mayo 2016, 00:36
Llegar pronto al SOS 4.8 tiene sus ventajas: apenas hay colas y es más fácil -y rápido- disfrutar de las distintas opciones de ocio que cada año oferta el festival. Este, el certamen ha incluido una atracción de coches de choque y una zona de juegos equipada con billar, mesa de ping pong y dianas, que además tiene premio para el ganador: un gin-tónic. De ellas dieron cuenta ayer los 'sosers' más madrugadores, quienes acudieron al festival para bailar con los primeros directos musicales, pero también para dar el primer paseo -el de reconocimiento- por el recinto del festival.
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Parada obligada fue el punto de información ubicado junto a la entrada a La Fica, donde los visitantes preguntaron por horarios, líneas de autobús y por el canje de las entradas de día -son de papel y no permiten el acceso al recinto una vez que se ha salido de él; se puede volver a entrar si se adquiere la pulsera de tela, abonando 10 euros-; pero también los 'stands' situados nada más acceder al recinto fueron el destino de muchos de los asistentes.
Uno de los más concurridos fue el instalado en el certamen por las firmas de cosméticos Sephora y Make Up Forever, en el que los festivaleros -chicos y chicas- pudieron cambiar de 'look'; y el patrocinado por Vodafone, donde también los más atrevidos se dejaron maquillar el rostro.
Quienes llegaron pronto y se acercaron al edificio anexo al Auditorio Víctor Villegas -donde ayer arrancó el programa Voces- también tuvieron como ventaja ser los primeros en reservar hora en la experiencia 'Efímera', una iniciativa incluida en el apartado de Arte del festival que permite adentrarse en el último videoclip de igual nombre de la banda catalana Love of Lesbian. Para disfrutar de él -estará activo todo el fin de semana- es necesario adquirir un Red Bull en las barras del festival e inscribirse previamente con el 'flyer' que se obtiene con la compra de esta bebida energética.
Es lo que hicieron quienes quisieron disfrutar en primera persona de esta propuesta, que recomendaron «sin duda» a todos los fans de la banda. Con el reconocimiento al recinto ya realizado, el siguiente paso era disfrutar de la música, primero en el SOS Club, donde la pista de baile empezó a animarse con la caída del sol, y más tarde en los escenarios grandes.
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Buen ambiente, aunque escaso de público siempre a primera hora, un pequeño concierto promocionado por Ecoembes a base de instrumentos reciclados para concienciar sobre el cuidado del medio ambiente y mucha música cerraron la primera jornada del festival, que continúa hoy con una amplia lista de conciertos.
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